La modelo reveló que si tiene que declarar ante la Justicia en alguna causa contra Scioli, no durará en presentarse.
Gisela Berger respira un poco más tranquila luego de haber descargado su angustia en las redes sociales. Fue la semana pasada, más precisamente el miércoles, cuando Twitter se sacudió con las inéditas confesiones de la modelo sobre quien fuera su pareja, el ex candidato a presidente de la Nación, Daniel Scioli, con quien tuvo una hija, Francesca.
"Como lo hice público, estoy por lo menos un poco más tranquila", sostuvo la mujer de 30 años durante un contacto telefónico con el diario Clarín, donde dejó en claro que no habrá segunda oportunidad para el ex gobernador de la provincia de Buenos Aires: "para mí no tiene retorno. Está claro. Lo dije yo: hasta acá llegué. Las amenazas son mi límite".
No es la primera vez que Gisela hace este tipo de denuncias. "Recibí amenazas y no es que sea una defensa esto, pero me parece que no comparto un montón cosas. No tengo por qué recibir amenazas y yo no pienso igual. No puedo contar qué tipo de amenazas. Yo he sufrido un montón con él. No quiero pasarla más mal. Hasta acá llegué", había confesado anteriormente durante una entrevista con Perfil.
Sin embargo, a pesar del mal recuerdo que tiene de la relación con Scioli, la modelo aseguró que continuará frecuentando con el político. ¿La razón? Francesca, la pequeña de tres meses. La rubia negó las versiones que hasta este fin de semana sostenían que no le dejaría ver nunca más a la hija que tienen en común: "por supuesto que la verá, es un derecho de mi bebé que vea a su padre".
"Lo vi en la televisión. ¿Qué me pareció? Nunca me contestó dentro de la familia, menos le va a contestar a la prensa", expresó sobre la aparición del ex candidato en la pantalla chica y anticipó que si la Justicia la llama para declarar por alguna causa contra su ex pareja, no dudará en presentarse: "pero claro, no tengo nada que ocultar. Está a la vista, ¿no?".