El canciller de Venezuela afirmó que Rusia brindará "toda su cooperación y apoyo" a Caracas ante el bloque naval y las acciones de Estados Unidos en el Caribe, denunciadas como violaciones al derecho internacional, y ratificó solidaridad entre ambos países.
El gobierno de Rusia aseguró este lunes que ofrecerá "toda su cooperación y apoyo" a Venezuela ante lo que funcionarios venezolanos describen como un bloqueo impuesto por Estados Unidos a buques petroleros de ese país en el mar Caribe, según reportó el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yván Gil, tras una conversación con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov.
El canciller venezolano publicó en su canal oficial de Telegram que Lavrov "expresó de manera firme la solidaridad de Rusia con el pueblo de Venezuela y con el presidente Nicolás Maduro", además de confirmar su respaldo ante las medidas que Caracas ha denunciado como agresiones unilaterales.
La declaración de apoyo se produce en medio de una escalada de tensiones entre Caracas y Washington, después de que Estados Unidos ha interceptado y confiscado varios petroleros venezolanos como parte de acciones que, según el gobierno venezolano, constituyen "violaciones flagrantes al derecho internacional" y actos de piratería.
Venezuela también denuncia que estas acciones forman parte de una presión más amplia de Washington que incluye un despliegue militar en la región, y han sido objeto de críticas por parte de otros países como Irán, que también ofreció su cooperación para enfrentar lo que Caracas califica de piratería y terrorismo internacional.
Gil indicó que en la llamada con Lavrov ambos funcionarios repasaron "las agresiones" atribuidas a Estados Unidos y que Rusia se comprometió a respaldar a Venezuela no solo políticamente, sino también en foros internacionales como el Consejo de Seguridad de la ONU, donde Caracas busca apoyo frente a las medidas de Washington.
El respaldo de Moscú pone de manifiesto la tradicional alianza entre ambos gobiernos y pone un foco directo sobre la disputa diplomática con Estados Unidos, que mantiene el bloqueo de buques como parte de su política de presión sobre el régimen de Maduro.
Analistas señalan que este respaldo ruso puede profundizar las tensiones geopolíticas en el mar Caribe, donde acciones de EE. UU. contra buques vinculados a Venezuela han sido interpretadas por Caracas y sus aliados como un cuestionamiento directo a su soberanía e integridad territorial.
El intercambio diplomático también marca una plataforma de coordinación más sólida entre Caracas y Moscú, con repercusiones posibles en el equilibrio de fuerzas diplomáticas en América Latina y en votaciones clave dentro de organismos multilaterales como la ONU.