Los activistas de Greenpeace organizan masivas protestas entre el 23 y 24 de agosto en cinco regiones de Brasil para pedir medidas concretas y rápidas de parte del Gobierno en la protección de la Amazonía.
Los activistas de Greenpeace organizan masivas protestas entre el 23 y 24 de agosto en cinco regiones de Brasil para pedir medidas concretas y rápidas de parte del Gobierno en la protección de la Amazonía, lugar en donde desde hace 18 días se están produciendo numerosos incendios.
"Entre el 23 y el 25 de agosto, cientos de personas en todo Brasil se movilizarán para exigir la protección de la Amazonía. La selva tropical más grande del mundo es vital para regular el clima en el planeta. Los voluntarios de Greenpeace estarán presentes en las movilizaciones que tendrán lugar en las cinco regiones del país", informó la organización en su página web.
Zonas selváticas y naturales de Brasil, como la Amazonía y el Pantanal, viven la peor oleada de incendios de los últimos cinco años, según el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), que registró más de 72.000 focos ígneos en lo que va de este año.
En lo que va del mes de agosto, se produjeron 34.278 incendios, de acuerdo a este organismo.
Las zonas más afectadas son la Amazonía, que ocupa buena parte del norte y noroeste del país, seguida del Pantanal (oeste y sudoeste), aunque hay también incendios en el sur, muy cerca de grandes ciudades como Sao Paulo, que el 19 de agosto sintió los efectos del humo, según medios locales.
Los focos ígneos se extienden en los estados de Acre (noroeste), Rondônia (noroeste), Mato Grosso (oeste) y Mato Grosso do Sul (sudoeste), llegando a la frontera con Bolivia y con Paraguay.
"El número de brotes de incendios registrados en el Amazonas en 2019 es uno de los más grandes en los últimos años. Desde enero hasta el 20 de agosto, el número de incendios en la región fue 145% mayor que en el mismo período de 2018", agregó Greenpeace.
La movilización comenzará en la tarde de este 23 de agosto en Sao Paulo, Río de Janeiro (sur), Brasília (centro) y Campo Grande (oeste).
Luego, el 24 de agosto se realizará en Belo Horizonte (sur), Vitória (sur), Porto Alegre (sur), Imbé (sur), Goiânia (centro), Sao Luis (noreste), Fortaleza (este), Manaus (norte).
Por último, el cierre de las movilizaciones se dará en la tarde de este 25 de agosto en Río de Janeiro (sur).
Expertos y funcionarios dicen que los incendios forestales son causados por el clima seco; en algunas regiones no ha estado lloviendo durante aproximadamente 90 días.
El 21 de agosto, Bolsonaro sugirió que organizaciones no gubernamentales (ONG) podrían estar detrás de los incendios para llamar la atención contra el Gobierno.
Las políticas de Bolsonaro para la selva tropical provocaron que Noruega y Alemania suspendieran hace días sus aportaciones al Fondo Amazonia, destinado a proteger ese bioma.
El presidente francés, Emmanuel Macron, calificó como una crisis internacional la propagación de los incendios en la Amazonía y propuso tratar esta situación de emergencia en la cumbre del G7 que tendrá lugar del 24 al 26 de agosto en la ciudad francesa de Biarritz.
Asimismo, desde París anunciaron que se oponen al acuerdo comercial entre la Unión Europea y el Mercosur, hasta tanto Brasil no tome medidas sobre su política ambiental, siguiendo una medida que había tomado previamente el Gobierno de Irlanda.
Bolsonaro interpretó como una muestra de "mentalidad colonialista" la propuesta de su homólogo francés.
Según datos de la ONG brasileña Imazon, citados por el Centro Latinoamericano de Ecología Social, la deforestación en la Amazonía brasileña aumentó 54% en enero de 2019 respecto al año anterior.
De acuerdo al Global Forest Watch, que monitorea los bosques a nivel global, en 2018, Brasil perdió casi tres millones de hectáreas de masa forestal.