JEl presidente de Israel, Reuvén Rivlin, advirtió al primer ministro Benjamín Netanyahu contra el establecimiento de alianzas con partidos europeos de la extrema derecha que son antisemitas.
El presidente de Israel, Reuvén Rivlin, advirtió al primer ministro Benjamín Netanyahu contra el establecimiento de alianzas con partidos europeos de la extrema derecha que son antisemitas.
La advertencia se produjo en el marco de los actos que tuvieron lugar en el Museo del Holocausto de Jerusalén, coincidiendo con la jornada de recuerdo de los judíos muertos en los campos de concentración y exterminio nazis.
"Con el resurgimiento de fuerzas antiisraelíes neofascistas y radicales, podríamos encontrarnos en una situación en la que importantes aliados europeos están dirigidos por gobiernos que incluyen elementos antisemitas o, Dios no lo permita, están guiados por líderes antisemitas", advirtió Rivlin.
El presidente agregó que "no todos los partidos de extrema derecha de Europa que creen en la necesidad de controlar la inmigración o mantener su carácter único son antisemitas o racistas. Sin embargo, los poderes políticos que incorporan el antisemitismo y el racismo en su lenguaje, legado y espíritu, nunca pueden convertirse en nuestro aliados".
"Israel debe hablar con una voz clara y sin compromisos. Ningún interés o consideraciones de realpolitik pueden justificar una alianza deshonrosa con grupos racistas o con elementos que no reconocen su pasado ni su responsabilidad por los crímenes del Holocausto", afirmó.
Rivlin puntualizó que "es importante ser claro: no estamos en los años treinta; no estamos al borde de un segundo Holocausto u otra cosa parecida. Pero no podemos ignorar el viejo-nuevo antisemitismo que otra vez está alzando la cabeza, alimentado por olas de inmigración, por crisis económicas, por desilusión con la clase política".
Las palabras del presidente de Israel se interpretan en el país como una advertencia al primer ministro Netanyahu, quien estableció en los últimos años relaciones estrechas con varios líderes políticos europeos, especialmente de Europa del este, a los que se vinculó en más de una ocasión con el antisemitismo.
Rivlin, que realizó su carrera política en el Likud, el partido de Netanyahu, pertenece a la diminuta corriente liberal del partido que mantiene unas tensas relaciones con el primer ministro.