Pablo Jávega identificó al acusado. Se trata de una persona que ya había declarado como testigo. Su ADN fue encontrado en el cinto de la bata que se utilizó para asesinar a la víctima.
El fiscal Pablo Jávega, a cargo de la investigación del crimen de Nora Dalmasso, identificó a Roberto Bárzola como el nuevo sospechoso en el caso. El ADN de Bárzola fue encontrado en el cinto de la bata con la que la víctima fue estrangulada en 2006, en Río Cuarto.
Bárzola, un trabajador que se dedicaba a pulir los pisos de madera de la casa de Dalmasso, había declarado anteriormente como testigo. La fiscalía confirmó que estuvo en la vivienda durante la semana en que ocurrió el asesinato. Fue imputado por el delito de abuso sexual seguido de muerte, aunque se decidió que permanezca en libertad.
El fiscal Jávega informó que Bárzola fue convocado para designar abogados y tomar conocimiento de las pruebas en su contra. "Se le permitió proponer defensores y se le garantizó su derecho a defensa", explicó. Bárzola optó por no declarar.
Jávega destacó que tanto la familia de la víctima como el acusado participaron en las pericias genéticas realizadas sobre el cinto y un cabello hallado en la zona inguinal de Dalmasso.
El hallazgo del ADN de Bárzola representa un avance clave tras la absolución en 2022 del viudo Marcelo Macarrón, el único imputado hasta entonces. Según la investigación, la víctima habría mantenido relaciones sexuales "semi consentidas" antes de ser asesinada, y el cinto de su bata fue identificado como el arma homicida.
El resultado es fruto de un trabajo conjunto entre el Ministerio Público Fiscal de Córdoba, el Centro de Genética Forense local, y expertos internacionales. La Justicia busca acercarse a la "verdad histórica" del caso, luego de más de 17 años sin una resolución definitiva.