¿Te han diagnosticado hipertensión y quieres ponerle remedio? No pienses solo en restringirte la sal. Hay un montón de alimentos beneficiosos para tu salud
Te has hecho un chequeo médico anual y te han encontrado una sorpresa desagradable: tienes la presión arterial alta. ¿Y ahora qué? Sabemos que la hipertensión puede causar muchos problemas: desde daños en las arterias o el corazón a lesiones cerebrales, disfunción sexual o dificultad para dormir. Vaya panorama. Entonces ¿qué podemos hacer?
La alimentación, por supuesto, es fundamental, como en otros aspectos de la vida. Generalmente, cuando relaciones hipertensión con platos a cocinar, solemos pensar inmediatamente en limitar el consumo de sal. La dieta DASH, explica el cardiólogo Marwah Abdalla en "Prevention", es ideal para estos casos, pues es rica en alimentos que contienen un alto nivel de sodio, potasio, proteína o fibra. ¿Cuáles son los platos recomendables?
Ya sabemos todos los beneficios de tomar una dieta alta en verdura y fruta. En concreto, los plátanos son muy ricos en potasio (ay, qué bien vienen para los calambres musculares). También son altos en fibra, y combinan fenomenal si te apetece, por ejemplo, hacer un batido, pues aportan dulzor a la combinación.
Los arándanos, de igual manera, son una idea estupenda para tu ingesta diaria de fruta. Están llenos de óxido nítrico, un gas que ayuda a aumentar el flujo sanguíneo, disminuyendo así la presión arterial. El kiwi y los melocotones también son una buena idea. ¿A qué esperas?
Según el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés), el compuesto de alicina en el ajo puede ayudar a reducir la presión arterial. La alicina se libera cuando el alimento se cocina o se tritura. Sin embargo, los médicos no recomiendan el uso de suplementos, ya que según una investigación, su función en este caso es limitada y no funcionan de igual forma.
Qué rico está. ¡Y cuántas combinaciones permite este pescado! Los pescados grasos como el salmón y la caballa son ricos en ácidos grasos omega-3, que reducen la inflamación y pueden ayudar a disminuir la presión arterial.
La dieta DASH permite muchas combinaciones para aquellos aquejados de hipertensión, que no se limitan a restringir la sal
También son una gran fuente de vitamina D, que ayuda al cuerpo a absorber el calcio, a proteger contra la depresión y a regular la presión arterial. Vamos, que son todo ventajas. Desde la soja, la pimienta o las hierbas, o incluso con miel y quinoa (la cual, por cierto, también viene de fábula para la presión arterial), permite muchísimos platos que harán que te chupes los dedos, literalmente.
Llegó hace un tiempo a nuestras cocinas para quedarse. Es una gran fuente de calcio, magnesio y contiene aproximadamente 975 miligramos de potasio. Lo puedes tomar en ensalada, con tomate y rúcula, o incluso en tostada.
Los estudios han demostrado que las dietas ricas en verduras crucíferas (como esta) han conducido a niveles más bajos de enfermedades cardíacas y podrían estar relacionados con una mayor longevidad. Para obtener la mayor cantidad de nutrientes hay un truco.
Corta la verdura y déjala reposar durante unos 40 minutos. De esta manera se liberarán las encimas que combaten las inflamaciones. Luego cómela como prefieras, con sal, aceite, hervida... ñam.
Ayudan a reducir la presión arterial alta porque contienen potasio y vitamina A. También son ricos en fibra y vitamina C. Son bastante versátiles, así que puedes combinarlos con carne o pescado o incluso hacer wok con fideos.
Y llega lo bueno. Buenas noticias si eres amante del chocolate: según un estudio realizado en mayo de 2017 en Heart, reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Eso sí, tampoco te excedas de una o dos onzas, porque aunque es saludable para los vasos sanguíneos también es alto en calorías.