Felipe Solá participó de manera virtual en el segmento ministerial de la Pre-Cumbre de Naciones Unidas sobre Sistemas Alimentarios en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
El canciller Felipe Solá sostuvo que la pandemia de coronavirus "ha empeorado los indicadores de hambre y de malnutrición a nivel mundial e incrementado las enormes brechas de desarrollo", por lo que se debe "poner todos los esfuerzos para luchar contra el hambre y la pobreza".

Solá hizo estas afirmaciones al participar de manera virtual en el segmento ministerial de la Pre-Cumbre de Naciones Unidas sobre Sistemas Alimentarios en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en Roma.

El encuentro contó con la participación del secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres; del Director General de la FAO, Qu Dongyu, y del premier de Italia, Mario Draghi, así como ministros y representantes de los países participantes.

"La temática de los sistemas alimentarios reviste una particular importancia para Argentina, siendo uno de los principales productores y exportadores de alimentos sanos y nutritivos", dijo Solá, según informó un comunicado la Cancillería.

Añadió que "es una triste realidad que la crisis del COVID-19 ha empeorado los indicadores de hambre y de malnutrición a nivel mundial. La pandemia también ha incrementado las enormes brechas de desarrollo, afectando más gravemente a los países en desarrollo".

"Esta situación nos exige poner todos nuestros esfuerzos para promover políticas de lucha contra el hambre y la pobreza, como así para mantener el normal funcionamiento de las cadenas de valor agroalimentarias", aseveró el funcionario argentino.

Solá reafirmó que "mantenemos nuestro compromiso de continuar produciendo alimentos sanos inocuos y nutritivos de forma sostenible, respetando el equilibrio entre los tres pilares de la sostenibilidad, de manera de contribuir a poner fin a la pobreza, la erradicación del hambre y la distribución progresiva del ingreso; el uso eficiente y sostenible de los recursos naturales y el desarrollo nacional, sin dejar a nadie atrás".

La Pre-Cumbre es la etapa de preparación de la Cumbre de Naciones sobre Sistemas Alimentarios que tendrá lugar en septiembre en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas, en Nueva York, donde se debatirán temas relacionados con las dietas saludables, aspectos productivos vinculados a los sistemas alimentarios y asuntos relacionados con la erradicación del hambre y la malnutrición, se explicó.

La Cancillería resaltó que "la Argentina ha asumido un papel activo y constructivo desde el inicio del proceso preparatorio de la Cumbre hace más de un año, dado que entendemos la relevancia de los sistemas alimentarios y el papel de nuestro país en la materia, en momentos en que aún hay mucho que hacer para paliar el hambre y la malnutrición en el mundo, más aún luego del agravamiento generado por la pandemia".

La Argentina integra, junto a otros 12 países, el Comité Asesor de la Cumbre y se sumó al Área de Acción 2 "Adoptar modalidades de consumo sostenibles", uno de los temas elegidos para ser tratados en profundidad a lo largo de la Cumbre.

El canciller convocó "a tres diálogos que contaron con una amplia participación de variados actores que integran los sistemas alimentarios argentinos, incluyendo productores, organizaciones de la sociedad civil, representantes de agricultura familiar, mujeres, entre otros", se afirmó.