Los hechos habrían ocurrido desde 2009 en el Monasterio del Cristo Orante y en el Gran Mendoza.
Los dos religiosos fueron trasladados a la Capital de Mendoza. En la causa intervienen los fiscales Alejandro Iturbide y Javier Pascua(Valle de Uco) y Alejandro Gullé, procurador de la Provincia.
Los religiosos fueron denunciados hace dos meses por una persona que fue seminarista del lugar.