Los ingresos del fisco fueron 10 puntos inferiores al IPC. Preocupa a la misión del FMI en Buenos Aires la persistencia de la brecha.
Si se confirma esta proyección, la brecha incluso habrá subido dos puntos con relación a enero. Fiscalmente el dato preocupa, ya que la falta de reacción del nivel de ingresos públicos, con un nivel de gasto público creciente, implicará que el Gobierno deberá continuar financiándose a través del Banco Central. El problema es reconocido por el propio organismo que maneja Mercedes Marcó del Pont, que mencionó en su informe mensual que “la recaudación sigue condicionada por el bajo dinamismo en el nivel de actividad y en los indicadores del mercado de trabajo”.
p7-recauda.jpgEl dato difundido ayer ya se encuentra en las carpetas de los funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI) que están en Buenos Aires. Los técnicos comandados por la directora Adjunta para el Hemisferio Occidental, Julie Kozak, y el jefe del caso argentino Luis Cubeddu, están preocupados por la brecha entre recaudación de impuestos e inflación; capítulo que viene siendo mencionado por los visitantes desde los tiempos en que comenzó el préstamo stand by en 2018 durante el gobierno de Mauricio Macri. La misma a esta altura de la crisis económica se ha tornado estructural en una economía que parece no tocar fondo. Si se analiza la evolución de ambas variables en el último año, en las que se insistió en subir la presión fiscal para achicar el déficit primario, la Argentina solo pudo registrar un saldo positivo en agosto y noviembre. Y si se mira un poco más atrás, al 2018, las diferencias arrancaron en agosto apenas asumido el anterior administrador Federal de Impuestos, Leandro Cuccioli.
Así, para los funcionarios del FMI lo importante, en última instancia, es tener claro si más allá de las promesas del ministro de Economía, Martín Guzmán, la Argentina va a estar en condiciones de pagar sus compromisos y para ello tiene que revertir la tendencia.
Por lo pronto, el mes pasado la recaudación de impuestos propiamente dicha alcanzó a $268.560,5 millones, con un incremento del 42,1%. De ello, el IVA aportó $141.997,3 millones, y a su vez, el componente vinculado al consumo dejó en las arcas $106.414,1 millones con un incremento de apenas el 30,3%. Por otro lado, el componente aduanero dejó 39.773,2 millones, con una mejora del 64,6%. Además, el Impuesto a las Ganancias registró ingresos por 93.116,4 millones, con una mejora del 34,1%.
En febrero, los datos de los tributos vinculados al comercio exterior reflejaron la decisión de los productores del campo de liquidar sus granos previendo una suba de las retenciones. Hubo ingresos por $21.099,8 millones, con un incremento de apenas el 19,9%. En cambio, los aranceles a las importaciones y la Tasa de Estadística generaron ingresos por $11.935,9 millones, lo que representó una suba del 51,9%.
El otro elemento que vino para reforzar los ingresos del fisco fue el denominado Impuesto PAIS que aportó $7.532,2 millones. En el bimestre, el gravamen a las compras de dólares en el Mercado Único y Libre de Cambios generó $10.718,2 millones. Por otro lado, Bienes Personales registró una recaudación del $5,185,3 millones. El impuesto que logró hacer un aporte importante a la recaudación general en febrero fue el que alcanza a los Débitos y Créditos Bancarios. Generó $35.248,8 millones, con un incremento del 41,9%.
Por otro lado, los aportes a la Seguridad Social registraron ingresos por $122.536,2 millones, con una mejora del 42,8%. De acuerdo con la AFIP, en definitiva, las cifras reflejan las pérdidas de puestos de trabajo declarados a lo largo del 2019, que alcanzó a unos 140.000 empleos que en definitiva, dejaron de generar aportes al fisco.