Dos guardias de seguridad fueron imputados por el crimen de un joven a quien sorprendieron cuando intentaba robar duraznos en una finca el fin de semana último en la localidad mendocina de Maipú, informaron fuentes judiciales.
El fiscal de la causa, Carlos Torres, imputó en las últimas horas a dos guardias de seguridad por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”, en perjuicio de Sergio Alaniz (22), y fueron trasladados a un penal provincial.
El hecho fue descubierto el sábado pasado cuando el cuerpo de un joven de 22 años fue encontrado con una herida de arma de fuego en una finca de la localidad de Coquimbito, en Maipú.
Los investigadores identificaron al joven como Alaniz, cuyos familiares habían denunciado su desaparición el miércoles 8 de enero en la oficina fiscal 10 de Maipú.
El cuerpo del joven fue encontrado tendido en el suelo con una herida de arma de fuego en la zona lumbar en el interior de la finca Ruano, donde se cree que Alaniz había ingresado con un amigo a robar duraznos.
En el lugar, la policía se entrevistó con dos guardias de seguridad privada, quienes finalmente fueron detenidos y quedaron a disposición de la justicia.
Personal de la policía Científica secuestró dos escopetas, calibre 16, que se cree que se utilizaron en el crimen del joven en el predio ubicado en calle Zanichelli y Urquiza, en la localidad mencionada.
El fiscal de la causa y con elementos que arrojaron las pericias decidió imputarlos por el crimen de Alaniz y trasladados a la penitenciaria provincial.