El primer ministro de Australia ha sido duramente criticado por los feroces incendios que arrasan el país. Recientemente los vecinos de una localidad afectada por las llamas mostraron su descontento con el político.
Un bombero de Australia que estuvo combatiendo un fuerte incendio en el pueblo de Nelligen, en la costa de Nueva Gales del Sur se dirigió desde su camión a una cámara del medio local, 7NEWS para dejar un contundente mensaje al primer ministro del país, Scott Morrison.
"¿Eres de los medios?", preguntó Paul Parker al camarógrafo. "Dile al primer ministro desde Nelligen que le den!".
Más tarde, el hombre de 57 años se desplomó al suelo por agotamiento. Parker explicó que en su pueblo ya "perdió 7 casas y no va a perder otra".
Según confesó el hombre se encontraba "absolutamente horrorizado" por el Gobierno y "particularmente Scott Morrison". Parker sostuvo que los bomberos estaban "arriesgando sus vidas" combatiendo los incendios.
"No lo hago por ti, Scott Morrison, no lo hago por ninguno de ustedes en el Gobierno", añadió. Uno de sus colegas agregó que Morrison debe "dimitir ya".
El video con el mensaje fue difundido en las redes sociales este sábado y fue visto más de 2 millones de veces, acumuló unos 62.700 "me gusta" y lo compartieron alrededor de casi 20.000 usuarios.
El político, por su parte, no hizo ningún comentario al respecto.
El primer ministro australiano, Scott Morrison, no afronta por primera vez insultos por parte de los ciudadanos. Así este jueves tuvo que abandonar su encuentro con los habitantes de la ciudad de Cobargo, en el estado de Nueva Gales del Sur, después de que los lugareños, furiosos, lo insultaran y le dirigieran desagradables comentarios.
Uno de ellos se dirigió a Morrison señalando que debería estar "avergonzado de sí mismo" y que había "dejado que el país se quemara".
"¡Eres un idiota!", le gritó uno de los ciudadanos enojados.
Las críticas se debieron a que el político estuvo de vacaciones familiares en Hawái mientras los incendios forestales se propagaban por todo el país. No obstante, el primer ministro aceptó las críticas y expresó que comprendía la situación.
"Entiendo los fuertes sentimientos que tiene la gente; lo han perdido todo. Ha habido mucha agitación y entiendo esas emociones", dijo Morrison.