Dos personas fueron detenidas acusadas de estafar a distintas personas simulando ser abogados. Uno de ellos se hacía pasar por un profesional que tomaba casos penales, mientras que el otro se involucraba en remates de vehículos. 

Juan Paulo Damián Escudero terminó en la cárcel luego de engañar a una mujer que lo contrató porque su hermano había sido denunciado por violencia de género. El acusado "se hizo cargo del caso" y cobró por asumir la defensa, sin embargo, pocas respuesta le daba a sus clientes. Por orden de la fiscal Susana Muscianissi los efectivos de Delitos Económicos allanaron su casa de calle Di Paola de Palmira, San Martín, en donde lo detuvieron. 

El segundo detenido es Mario Walter Ochoa (56), imputado por presuntas estafas a personas que pretendían comprar autos y camionetas de remate que estaban depositadas en la Playa de Secuestros de San Agustín. 

El acusado se presentaba ante los interesados como abogado, funcionario judicial o policía, asegurando tener contactos con un juez y que con sólo con una suma de dinero él les facilitaría el trámite.