La identificación con análisis de ADN de las 157 víctimas del accidente del Boeing 737 Max 8 en Etiopía podría durar 6 meses, informó la compañía Ethiopian Airlines.
"Los resultados de los análisis de ADN serán anunciados aproximadamente en cinco o seis meses tras la toma de las muestras", informó la compañía aérea, en un documento transmitido a los allegados de las víctimas. Este documento fue transferido a la AFP por un pariente de una de ellas, que pidió conservar el anonimato.
El ministro etíope de Transportes, Dagmawit Moges, declaró por su parte durante una conferencia de prensa en Adís Abeba que la investigación sobre las causas del accidente "requiere un análisis minucioso y un tiempo considerable para extraer conclusiones concretas", agregó. El accidente que causó la muerte de 157 personas de 35 nacionalidades, es el segundo en menos de cinco meses de un Boeing 737 Max 8, al que muchos países ahora han prohibido volar, entre ellos Estados Unidos, donde se fabrica.
En circunstancias similares, un avión del mismo modelo de la compañía indonesia Lion Air cayó al mar en octubre frente a las costas de Indonesia, causando 189 muertos. El informe de investigación preliminar sobre las causas del accidente fue publicado alrededor de un mes después del accidente.
Víctimas de 35 nacionalidades
La identificación de las víctimas se realizará cotejando el ADN de los restos recogidos en el lugar de la tragedia, a unos 60 km al este de Adís Abeba, con las muestras de ADN presentadas por las familias. Estos familiares pueden entregar muestras de ADN en Adís Abeba o en cualquier oficina de Ethiopian Airlines, según el documento.
Además, los efectos personales recogidos del lugar del accidente serán devueltos a las familias en "aproximadamente dos meses" y los certificados de defunción en dos semanas, precisó el texto.
La persona que compartió el documento con la AFP indicó que su pariente fallecido es de confesión judía y que su funeral no puede por lo tanto tener lugar sin sus restos. El plazo de seis meses es difícil de aceptar para la familia, según esta fuente. Las cajas negras del Boeing 737 Max 8 de Ethiopian Airlaines fueron enviadas a Francia, donde serán analizadas por la agencia francesa de investigación y análisis.
jov (afp, Reuters)
El 8 de marzo de 2014 el vuelo MH370 que despegó de Kuala Lumpur rumbo a Pekín desapareció. Según "60 minutos" de la TV australiana, el avión de Malaysia Airlines con 239 pasajeros cayó al Océano Índico. Según científicos, el piloto fue el autor: se puso máscara de oxigeno, despresurizó la cabina dejando inconsciente a todos los demás y desvió el aparato hasta que cayera por falta de combustible.
El 8 de marzo de 2014 a las 00:41 horas despega el Boeing 777 del aeropuerto internacional de Kuala Lumpur con 227 pasajeros a bordo en dirección a Pekín. Veintiséis minutos más tarde se desconecta el sistema automático (ACARS), que transmite datos sobre funciones mecánicas durante el vuelo.
Pocos minutos más tarde, el Boeing 777 abandona la zona de vigilancia malasia y pasa al radar de Vietnam. Una voz desde el cockpit dice “Buenas noches, Malaysian tres siete cero”. La compañía aérea cree que se trata de la voz del copiloto Fariq Abdul Hamdi. Las condiciones del tiempo son buenas.
A las 01:30 horas, se desconecta el transbordador a bordo de la nave que transmite informaciones sobre la posición y la altura, con la consecuencia de que el avión desaparece de la pantalla de los controladores de vuelo. Los sistemas militares de radar detectan el avión a las 2:15, al sur de Phuket, sobre el estrecho de Malakka, a cientos de kilómetros del curso planificado.
El avión siguió enviando señales a los satélites. La última señal fue recibida a las 8:11 horas. Luego se supone que se hallaba en un corredor noroeste entre el norte de Tailandia y la frontera sur de Kazajistán y Turkmenistán, o en un corredor sur entre Indonesia y el sur del Océano Índico.
Desde el 12 de marzo, 12 países participan en la búsqueda, que se extiende a ambos lados de la península malasia y a lo largo de un territorio más grande que Austria. Un satélite chino descubre tres grandes partes del avión flotando en el Mar Meridional de la China, y se cree que se trata de restos del Boeing 777.
El primer ministro de Malasia, Najib Razak (a la derecha) dio a conocer dos días después que el avión se había alejado de su ruta y que “hubo personas que influyeron en el desplazamiento de la nave”. Malasia organiza investigaciones y se registran la vivienda del piloto y del copiloto.
Las autoridades malasias presentan nuevas informaciones sobre las últimas conversaciones desde la cabina del piloto. Se presume que pudo tratarse de un sabotaje, de un secuestro, o del suicidio del piloto. Hasta ahora, sin embargo, no hay indicios de motivaciones criminales ni políticas entre los pasajeros ni entre los miembros de la tripulación.
El 24 de marzo, el primer ministro Najib Razak comunica que, según nuevos datos satelitales, el vuelo MH 370 probablemente cayó en el Océano Índico. Muchos de los familiares, que ya estaban desesperados por la infructuosa búsqueda y fueron informados falsamente por las autoridades, reaccionan con indignación. Se llevan a cabo manifestaciones ante la embajada de Malasia en Pekín.
Algunos familiares no aceptan la declaración de las autoridades malasias, entre ellos, la estadounidense Sarah Bajc, que esperaba la llegada del vuelo MH 370, en el que viajaba su compañero, Philipp Wood, también de EE. UU. Según ella, la explicación fue una “disculpa cómoda”, ya que no hay pruebas de que haya sido un accidente.
Los familiares de los pasajeros chinos protestan en el día de Año nuevo ante la embajada malasia en Pekín. La búsqueda tiene que continuar, exigen.
Cuatro barcos coordinados por Australia buscan actualmente con sondas a lo largo de una franja del Océano Índico, a unos 1.600 kilómetros de la costa oeste de Australia. La operación, con un presupuesto de 93 millones de dólares, se prolongará hasta mayo de este año.