La gravedad de la situación llevó al Gobierno a decretar la alerta máxima, situándola en el cuarto nivel en una escala de cinco, indicando que múltiples eventos graves afectan a la ciudad brasileña.
Un trágico balance se registra tras el fuerte temporal que azotó a Río de Janeiro durante el fin de semana, dejando un saldo parcial de once personas fallecidas y una mujer desaparecida.
La gravedad de la situación llevó al Gobierno a decretar la alerta máxima, situándola en el cuarto nivel en una escala de cinco, indicando que múltiples eventos graves afectan a la ciudad brasileña.
De acuerdo con el informe del Centro de Operaciones de Río, la magnitud del temporal se refleja en más de 30 concentraciones de agua, 17 puntos de inundación y cinco árboles caídos. Las imágenes muestran calles, viviendas y vehículos sumergidos bajo el agua, evidenciando los significativos daños causados por las inundaciones.
En medio de esta emergencia, las autoridades trabajan arduamente para atender la crisis y brindar apoyo a la población afectada.