El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, afirmó el sábado que las nuevas sanciones aprobadas por la administración Trump están generando "una compleja situación económica" en la isla, pero advirtió que "ninguna política imperialista" frenará su desarrollo.
"En este año, aún en el ojo del huracán de las adversidades que el enemigo concibió para asfixiarnos, la economía cubana puede crecer ligeramente, gracias a que contamos con potencialidades para resistir y continuar avanzando en nuestro desarrollo", dijo Díaz-Canel al clausurar la primera sesión anual del parlamento cubano.
Afirmó que "la persecución financiera y la política criminal de la actual administración estadounidense" buscan "afectar el turismo y la inversión extranjera" y están creando una "compleja situación económica" en la isla.
No obstante, subrayó que "el país avanza". "Ninguna política imperial podrá superar nuestra voluntad de ir por más", agregó en presencia de Raúl Castro, primer secretario del gobernante y único Partido Comunista.
En ese sentido, Díaz-Canel llamó a "aprovechar todas las oportunidades que se abren para la economía nacional (...) y desatar los nudos que la amarran".
"Hay que seguir buscando en nuestras reservas materiales y humanas. En lo que nos puede aportar el ahorro como fuente de ingresos y nuestra espiritualidad como fuente de energía creativa", apuntó.
Estados Unidos, que aplica desde 1962 un bloqueo económico contra Cuba, ha endurecido sus sanciones contra la isla desde la llegada al poder de Donald Trump en 2017, borrando el acercamiento que propició su antecesor, Barack Obama.
Washington culpa a Cuba de apoyar militarmente al presidente venezolano Nicolás Maduro, el principal aliado de La Habana.
Además de la prohibición de los viajes grupales educativos y los cruceros, las formas más usadas por los estadounidenses para visitar la isla, Washington limitó las remesas familiares, activó el título III de la ley Helm-Burton y añadió a Cuba a su lista negra de tráfico de personas.
El título III de la ley estadounidense Helms-Burton permite que estadounidenses y cubano-estadounidenses que se consideren afectados por las confiscaciones realizadas en la isla en los años 60 acudan a tribunales federales para pedir indemnizaciones a los nuevos administradores.
En la sesión parlamentaria de este sábado se aprobó una nueva Ley Electoral que restituye el sistema de gobierno con presidente de la República y primer ministro que Cuba tenía antes de 1976, cuando aprobó su primera Constitución socialista.