La víctima tiene 25 años. La paliza que le propinó su pareja le dejó el pulmón perforado, explosión en el colón e intestino delgado y hemorragias internas. El agresor está detenido.
Mónica, la madre de Camila, denunció que las agresiones de Sosa hacia su hija eran reiteradas. "Siempre fueron golpes y golpes. Ella siempre denunciaba pero cuando se reponía volvía otra vez con él" dijo la mujer, quien además señaló en diálogo con C5N, que "siempre quisiero advertirle pero nunca los escuchó".
"Desde que empezó a estar con él, mi hija se volvió alcohólica. La llevó a un estado crítico de alcoholismo y es adicta a las drogas. Él también es adicto", contó la mujer.
Mónica recuerda que ese día su hija fue hasta su casa alcoholizada, violentada. La echó y después la llamaron desde el hospital para avisarle que estaba en terapia intensiva. "Me la molió a palos", dijo la mujer en una entrevista para el portal sanfernandonuestro.com.ar.
La pareja tiene una hija un año y dos meses y según explicó Mónica "está al cuidado de un familiar de Sosa porque la nena corría riesgo de vida. Una vez agarró a la bebé y la colgó del balcón, eso fue contado por los vecinos. Por eso les sacaron la tenencia. Hasta que los dos no hagan un tratamiento no se pueden acercar a la nena".
"Él es una persona agresiva. En Corrientes tiene otra hija y se tuvo que escapar porque lo querían matar por lo violento que era. Quiero que siga preso. Si sale va a matar a mi hija. Hace cuatro meses estuvo internada cinco días en el Pirovano porque la había tirado por la escalera y le abrió la cabeza", reveló Mónica.
En la madrugada del jueves pasado la policía arrestó a Sosa, en su domicilio, a pedido de la fiscal Mariela Miozzo, quien lo imputó por "femicidio en grado de tentativa". Se encuentra alojado en la Comisaría 1° de San Fernando.
"Es una animal, quiero que se haga justicia, que no salga más y se pudra en la cárcel", dijo Mónica.