El Gobierno nacional oficializó este viernes un nuevo aumento en los impuestos a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono, que comenzará a regir a partir del 1° de septiembre de 2025 y que impactará directamente en los precios de la nafta y el gasoil en todo el país.

La medida fue publicada en el Decreto 617/2025 del Boletín Oficial y establece la aplicación de actualizaciones pendientes que no se habían trasladado durante gran parte de 2024 y el primer trimestre de 2025. Estos tributos se ajustan de forma trimestral según la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC).

Según el texto oficial, el objetivo es "recomponer progresivamente la recaudación tributaria sin descuidar el impacto en la actividad económica", razón por la cual se resolvió que el aumento de septiembre sea parcial.

En detalle, se fijó que el impuesto a los combustibles líquidos para la nafta sin plomo y la nafta virgen será de $10,523 por litro. Para el gasoil, el tributo será de $8,577 por litro, con un adicional de $4,644 por tratamiento diferencial.

Por otro lado, el impuesto al dióxido de carbono se actualizará a $0,645 por litro para nafta sin plomo y virgen, y a $0,978 por litro en el caso del gasoil.

Desde el Ejecutivo argumentan que la medida busca consolidar un "sendero fiscal sostenible" en línea con el programa de estabilización.