Con la inflación arriba del 55% y los salarios perdiendo terreno de forma acelerada por paritarias congeladas, los consumidores argentinos se están endeudando cada vez más y en niveles récord con las tarjetas de crédito para poder cubrir necesidades básicas.
La operatoria en pesos con tarjetas de crédito registró un saldo de 456.283 millones pesos a fines de septiembre, lo que significó un incremento récord del 5,9% respecto al cierre de agosto pasado.
A pesar de la recesión y la caída del consumo minorista en torno al 15% anual, el crecimiento interanual del uso de las tarjetas de crédito para consumidor alcanzó el 28,3% anual en septiembre pasado.
"Producto de la recesión y del ajuste de precios, los consumidores han usado los plásticos mayoritariamente para financiar sus compras, impulsado por el programa `Ahora 12` y en muchos casos para poder llegar a fin de mes", analizó la consultora financiero First Capital Group.
Este tipo de operaciones mantuvo su tendencia alcista por quinto mes consecutivo en septiembre, y los guarismos se van agravando a medida que pasan los meses.
El uso de tarjetas de crédito había crecido 3,4% mensual en agosto; 3,7% en julio; 1,4% en junio; 2,5% en mayo; en septiembre el incremento marcó un nuevo récord alcanzando un crecimiento del 5,9% respecto del mes pasado.
"Este segmento del mercado es el que explica prácticamente la mitad de la variación trimestral del total de préstamos, ya que durante los últimos tres meses notamos un alza de los saldos en cada uno de los mismos, con un total acumulado del orden de los 54.769 millones de pesos equivalentes al 13,6%", explicó Guillermo Barbero, socio de First.
El Banco Central precisó que el monto promedio por transacción bajó un 14%, más del triple que el global.