San Lorenzo de Almagro venció a Platense por 4 a 2, al cabo de un interesante encuentro disputado esta noche en el estadio "Ciudad de Vicente López", en el marco del inicio de la novena jornada de la zona A de la Copa de la Liga Profesional.
Federico Gattoni, a los 12 minutos del primer tiempo, inauguró el tanteador para el equipo visitante, mientras que Facundo Curuchet, a los 24 del mismo período, niveló transitoriamente las acciones para el "Calamar".
Alexis Sabella, a los 29 minutos del mismo período, volvió a colocar en ventaja al cuadro de Diego Dabove, en tanto que Mauro Bogado, un minuto antes del descanso, le devolvió la paridad al score mediante la ejecución de un penal.
Ya en el complemento, Gabriel Rojas, a los 29 minutos, y Franco Troyansky, a los 37, le dieron marco de goleada al triunfo visitante.
La flamante iluminación del estadio inaugurado en 1979 pareció unirse al buen fútbol que desplegaron ambos equipos.
Desde el mismo inicio del match se agredieron pero la diferencia sustancial entre uno y otro estuvo en la defensa.
Un "Calamar" peligroso en ofensiva no tuvo solidez en su zaga en toda la noche y sufrió en demasía los envíos aéreos rivales.
Antes del cuarto de hora inicial los "Santos" ya estaban arriba en el marcador luego de dos cabezazos en el área de Donatti y Gattoni que este último envío a la red.
Platense se repuso y empató a través de una buena jugada de conjunto que terminó en el remate de Curuchet que se desvió ligeramente en Donatti para descolocar a Devecchi.
Un yerro del arquero De Olivera ante un lejano remate de Sabella le estaba otorgando la ventaja parcial que el trámite requería al "Ciclón" pero una apresurada salida de Devecchi al llevarse por delante a Bogado en el área terminó con la ejecución de un penal del mismo jugador local para que se retiren al descanso con una igualdad que no sonaba ilógica.
El complemento siguió en la misma tónica pero un memorable gol de Gabriel Rojas con una chilena inconmesurable antes de la media hora rompió el partido y sumió al conjunto de Llop en especie de letanía, circunstancia de fácil comprobación tras el inexplicable quedo que sufrió la defensa de su equipo ante el cabezazo libre de marcas del ingresado Troyansky, que terminó por liquidar definitivamente el pleito.