El humorista, que continuaba trabajando cada día, falleció anoche tras sentirse indispuesto mientras cenaba con su familia en un restaurante de la localidad turística de Palmanova en la ciudad de Mallorca, España.
El célebre humorista gráfico Guillermo Mordillo, que a partir de las
ilustraciones que realizó en los 70 para la revista París Match se
transformó en un ícono del género, murió a los 86 años en la isla
mediterránea de Mallorca (España), donde tenía una casa y pasaba largas
temporadas, según informaron fuentes próximas a la familia.
El humorista, que continuaba trabajando cada día, falleció anoche tras
sentirse indispuesto mientras cenaba con su familia en un restaurante de
la localidad turística de Palmanova.
Mordillo había nacido en el barrio de Villa Pueyrredón en agosto de
1932, era hijo de padre extremeño y madre asturiana y logró fama mundial
a través de sus tiras de humor mudo. Estaba casado con Amparo Camarasa y
tenía dos hijos, Sebastién y Cécile.
Entre los galardones recibidos a lo lago de su extensa carrera figuran
el Premio Phoenix de Humor (1973), el Premio Yellow Kid (1974), el
Premio Nakanoki (1977), el Cartoonist of the Year del Montreal
International Salon of Cartoons (1977) y la Palma de Oro de San Remo.
El dibujante pasaba "muchos meses" en Mallorca y se encontraba "en plena
actividad"; se levantaba por la mañana temprano para trabajar y estaba
involucrado en un "montón de proyectos interesantísimos", según sus
allegados.
La infancia del humorista gráfico había transcurrido en el modesto
barrio bonaerense de Villa Pueyrredón. Sus principales aficiones eran el
dibujo y el fútbol, y sentía una gran admiración por dos personajes:
Buster Keaton y Walt Disney.
Se formó en la Escuela de Dibujantes, llamada hoy Escuela del Cómic, una
de las pocas existentes en el mundo, donde estudió las tradiciones
española e italiana del humor.
En los años sesenta desembarcó en Algeciras. Tras pasar algunas semanas
en España, se trasladó a París, donde vivió 17 años de la venta de sus
tarjetas humorísticas. Entró en el mundo de los periódicos a través de
un dibujo publicado en la revista Paris Match en 1966.