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Mendoza
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La ministra de Seguridad aseguró que la Justicia aceptó un pedido de su cartera para que trasladen a otro penal a Magdalena Espósito Valenti, madre del nene de 5 años y pareja de la coautora del crimen con quien compartía lugar de detención.
Los abuelos del pequeño Lucio Dupuy, víctima de un brutal asesinato, solían denunciar la situación con un toque de indignación: "Están de luna de miel", clamaban, exigiendo que los condenados cumplieran sus penas en prisiones diferentes.
Recientemente, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se comprometió a ayudar a la familia con este pedido, considerando que el traslado sería más un beneficio que una verdadera pena. La noticia del traslado de uno de los condenados fue bien recibida por el entorno de Lucio.
Espósito Valenti estaba detenida en el Complejo Penitenciario de San Luis junto a Abigaíl Páez, hasta que la primera fue trasladada al Complejo Penitenciario Federal N° 6 en Lujan de Cuyo, Mendoza.
El terrible crimen ocurrió en la ciudad de Santa Rosa, La Pampa, el 26 de noviembre de 2021. Esa noche, Lucio fue llevado al Hospital Evita de la capital pampeana por su madre y su novia, presentando múltiples lesiones graves y casi no tenía signos vitales. Los médicos no pudieron salvarlo y su fallecimiento fue confirmado poco después. Durante el juicio, se demostró que las mujeres mintieron ante los médicos, afirmando que habían sido atacadas por ladrones y que estos también habían agredido a Lucio.
La autopsia reveló que la causa de la muerte de Lucio fue una "hemorragia interna" causada por las brutales agresiones sufridas. Además, se descubrió que el niño tenía lesiones tanto antiguas como recientes, habiendo sido tratado previamente por fracturas en brazos y dedos en varios centros de salud. Su cuerpo mostraba golpes, mordeduras y quemaduras de cigarrillos.
El 17 de febrero de 2023, el Tribunal de Santa Rosa condenó a Magdalena Espósito Valenti, la madre, y a Abigail Pérez, su pareja, a prisión perpetua. Posteriormente, el Tribunal de Impugnación Penal de La Pampa confirmó las condenas y agregó el delito de abuso sexual a la madre.
El menor recibía burlas constantes de sus compañeros de escuela por sus gafas y dientes.
