La física rosarina Karen Hallberg, quien será distinguida el 14 de marzo en París en los Premios L‘Oréal-Unesco dentro de un selecto grupo de cinco mujeres de todo el mundo, dijo a Télam que "hacen faltan más mujeres en el campo de las ciencias ya que ser investigadora es una carrera apasionante".
Casada con un físico y madre de Kevin, de 30 años, que vive en Zurich, y de Tania, una médica de 26 años, se mostró sorprendida por esta distinción que se otorga desde 1998.
"No es un premio por el que se postula sino que está dado por un comité internacional liderado por premios Nobel o premios Fields, que es el mayor premio de Matemática, equivalente al Nobel", dijo la investigadora.
La premiación será el 14 de marzo durante "la semana de la mujer en la ciencia y la tecnología" en la sede de la Unesco, en París.
Hallberg nació en Rosario pero su infancia y adolescencia la vivió en Jujuy, donde cosechó muchos amigos y fue una destacada estudiante del Colegio Nacional 1 "Teodoro Sánchez de Bustamante". Como representante de ese establecimiento fue coronada reina provincial de los estudiantes.
"Fue algo maravilloso vivir toda esa etapa pero lo más valioso y que más rescato es el cariño de la gente de Jujuy", expresó.
Después de egresar del nivel medio tenía muy claro que su futuro estaba vinculado a las ciencias. Por eso se postuló y logró ingresar al afamado Instituto Balseiro, de Bariloche, donde estudió física e hizo la tesis doctoral que permitió seguir avanzar en su vocación ("la investigación", dice hoy). Luego también logró un posdoctorado en Alemania. De regreso de Europa, se volvió a establecer en Bariloche con un puesto del Conicet.
Hoy trabaja en un grupo como investigadora en el Centro Atómico Bariloche, que depende de la Comisión Nacional de Energía Atómica, y es jefa del Departamento Materia Condensada.
El premio internacional que se le otorgará es "por la trayectoria, no es por un trabajo en particular sino por la suma de los trabajos y de los aportes", dijo.
Hallberg será premiada junto a una matemática de Estados Unidos, una europea, una química africana y otra química asiática.
Sobre los premios, dijo que "se van alternando todos los años, un año es en ciencias de la vida y otro años en matemática, física, astronomía, computación y química".
Orgullosa de su equipo de trabajo -"para nosotros la ciencia no se hace sola"- destacó que juntos han desarrollado "una técnica numérica computacional para calcular propiedades cuánticas, electrónicas y a nivel atómico, lo que se llama materia condensada".
Y agregó: "Se trata de materiales especiales que presentan superconductividad, que son muy complejos para estudiar", por lo que "lo atacan desde el punto de vista numérico" y el resultado es "un metro numérico muy preciso que compite a nivel internacional".
Por este trabajo fue invitada a disertar en una conferencia mundial en Boston, el próximo mes de marzo.