La OMS advirtió sobre "tendencias preocupantes" a medida que se acerca la temporada de invierno en el hemisferio norte, mientras que las hospitalizaciones en Estados Unidos llevan siete semanas aumentando, aunque muy de a poco.
Ya no presenta la misma amenaza que en su tiempo, la mayoría de la gente se ha vacunado al menos una vez contra la enfermedad y dejó de constituir hace meses una “emergencia sanitaria global”, el nivel de alerta más alto de la Organización Mundial de la Salud (OMS), pero el coronavirus sigue volviendo de vez en cuando. Este jueves, por dar un ejemplo, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se restó de la cumbre del G20 en India, luego de dar positivo, aún asegurando que se encuentra “bien”. Y como él, a medida que se acaba el verano en el hemisferio norte, son más las personas que se contagian de nuevo de Covid-19.
La OMS expresó su preocupación este miércoles sobre la evolución de la pandemia a medida que se acerca el invierno boreal. El director general del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió en una conferencia de prensa en línea sobre los crecientes desafíos que enfrenta el mundo en la lucha contra el virus.
Según Tedros Adhanom, “las muertes están aumentando en algunas partes de Medio Oriente y Asia. Los ingresos a unidades de cuidados intensivos crecen en Europa y las hospitalizaciones aumentan en varias regiones”. La situación es particularmente alarmante debido a la llegada de la temporada invernal en el hemisferio norte, que históricamente ha sido un período crítico para la propagación de enfermedades respiratorias.
La falta de comunicación de datos por parte de muchos países ha limitado la comprensión completa de la situación actual, pero la OMS sigue observando “tendencias preocupantes” en todo el mundo. Aunque no existe una única variante dominante en este momento, se ha detectado un aumento en la subvariante ómicron EG.5.
En Estados Unidos, se ha registrado un aumento sustancial en las hospitalizaciones por Covid-19, marcando un cambio significativo en la situación. Durante la última semana, las nuevas hospitalizaciones aumentaron en un 16%, lo que continúa una tendencia al alza que comenzó a fines de julio. En algunos estados como Arkansas, Colorado, Indiana, Kansas, Minnesota, Oklahoma, Tennessee, Utah y Wyoming, las admisiones hospitalarias crecieron en más del 30% en la última semana.
Las hospitalizaciones han aumentado, en conjunto con las muertes. Jodie Guest, profesora de epidemiología en la Rollins School of Public Health de la Universidad Emory en Atlanta, indicó al respecto: “Todas estas cosas nos muestran que las tasas de transmisión del Covid han aumentado en nuestras comunidades”.
Este aumento, al menos en Estados Unidos, es el primero de esta magnitud en el año, y llega justo en el momento en que los alumnos vuelven al colegio, y un poco antes de que las vacunas más recientes lleguen a las farmacias norteamericanas para la campaña de inoculación de otoño.
Aun cuando los casos se han vuelto más difíciles de detectar, ya que no se les está pidiendo a los estados norteamericanos que rastreen los positivos de Covid, los expertos tienen otras herramientas para rastrear el virus: esencialmente, las hospitalizaciones.
A nivel nacional, el número de pacientes hospitalizados con Covid-19 ha seguido aumentando después de alcanzar un mínimo histórico a fines de junio. En la semana que terminó el 26 de agosto, la última fecha disponible para los datos, había más de 17.400 personas hospitalizadas con Covid-19, un aumento de casi el 16% con respecto a la semana anterior.
La doctora Deborah Birx, excoordinadora de respuesta al coronavirus en la Casa Blanca durante la administración de Donald Trump, expresó su preocupación de que Estados Unidos haya bajado la guardia y esté ignorando la ola de infecciones del verano. Advirtió que la percepción errónea de que el virus ya no es relevante podría llevar a una falta de pruebas y un aumento en la propagación no detectada del virus.