La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, afirmó que el gendarme argentino detenido en Venezuela, Nahuel Gallo, no es un terrorista, rechazando categóricamente las acusaciones formuladas por la Justicia de ese país. Gallo, quien fue arrestado el 8 de diciembre, se encuentra bajo investigación en Venezuela por presuntas "acciones terroristas". Sin embargo, Bullrich sostuvo que se trata de un ciudadano argentino que viajó al país caribeño como padre, con fines estrictamente personales.

"Nahuel Gallo no es un terrorista, es un ciudadano argentino que fue a Venezuela como papá", expresó Bullrich en una conferencia de prensa, acompañada por el canciller Gerardo Werthein. Los funcionarios del gobierno de Javier Milei calificaron las acusaciones de Venezuela como un "invento horrible" y ratificaron que están realizando todos los esfuerzos diplomáticos necesarios para asegurar la liberación de Gallo.

Por su parte, Werthein reiteró el compromiso de la Argentina en el caso y afirmó: "La Argentina está haciendo todo lo posible por el gendarme". Además, insistió en que Gallo ingresó al país de manera completamente legal, cumpliendo con todos los requisitos migratorios, lo que incluye la presentación de documentos y el pago de tasas correspondientes.

Bullrich también enfatizó la urgencia de resolver la situación y exigió la liberación inmediata de Gallo: "Queremos que Nahuel Gallo sea devuelto a la Argentina de manera inmediata". La conferencia de prensa se realizó tras un encuentro con los familiares del detenido, quienes también solicitaron la intervención activa del gobierno argentino. Entretanto, las gestiones diplomáticas continúan en busca de una solución que garantice el regreso de Gallo al país.