En declaraciones radiales, el magistrado planteó: “Quiero dejar en claro que la Corte no va a ceder a ninguna presión como nunca hemos cedido”.
Ricardo Lorenzetti, ministro de la Corte Suprema de Justicia, aseguró que los integrantes del tribunal no cederán ante las presiones. Sus declaraciones se originaron luego de que la semana pasada el oficialismo impulsara una movilización al Palacio de Tribunales.
En declaraciones radiales, el magistrado planteó: “Quiero dejar en claro que la Corte no va a ceder a ninguna presión como nunca hemos cedido”.
“Lo que no se puede aceptar es que una persona que tiene una causa judicial o un procesamiento o que ha cometido un delito y es investigada, pida que el juez que lo investiga renuncie; eso es una base en el estado de derecho y el juez tiene que tener la estabilidad necesaria”, explicó.
"La función de la Corte Suprema es resolver problemas concretos de las personas en nuestro país. La principal preocupación es la seguridad, los jubilados que no tienen adecuadamente su ingreso, los trabajadores. Desde que entré a la Corte Suprema hemos tenido muchas marchas, y quiero dejar bien en claro que la Corte no va a ceder a ninguna presión. Las marchas expresan lo que cada uno quiere expresar, pero nunca han tenido influencia en las decisiones de la Corte Suprema”, aclaró Lorenzetti.
Consultado sobre las declaraciones de Cristina Kirchner, que asegura que los golpes de Estado moderno son perpetrados por los jueces a través de la teoría del lawfare, Lorenzetti dijo que respeta la opinión de todo el mundo pero aludió a la situación de Lula Da Silva en Brasil para responder.
“Yo tengo una relación estrecha académica con la Corte brasileña. Y en el caso de Lula, el juez que resolvió tanto la acusación inicial por el Lava Jato y luego una nulidad presentada por los abogados y en ningún momento hablaron de lawfare; ni Lula ni el juez”, explicó.
Y ahondó: “Y eso es lo que hacemos nosotros, nosotros que tenemos que trabajar en base al derecho; si hay pruebas o no hay pruebas, si hay defensas o no hay defensas, lo demás son opiniones”.
“Yo respeto la opinión, pero para mí el lawfare no existe. Yo no tengo ninguna duda al respecto. Nosotros en la Corte hemos tenido siempre la misma conducta. Yo he dictado fallos con una línea de principios que sigo sosteniendo ahora, no voy a cambiar mi opinión por una coyuntura política. Las mismas decisiones que tomamos ahora las hemos adoptado con los cuatro presidentes que hemos tenido”, continuó.