El médico forense, que había sido convocado en 2004 para revisar la investigación, dio a conocer el resultado. En el momento del choque, los signos vitales de la princesa no evidenciaron la gravedad del cuadro.
Cerca de cumplirse 22 años de la muerte de Lady Di, un médico forense reveló detalles exactos del accidente automovilístico y las heridas que terminaron con la vida de la princesa de Gales.
A partir de aquel 31 de agosto de 1997, cuando Diana murió al cruzar el puente de l" Alma en París, hubo teorías de todo tipo, incluso algunas que alertaban sobre un posible asesinato. Sin embargo, para la investigación siempre estuvo en claro que la causa fue el choque que se originó por el estado de ebriedad de Henri Paul, el conductor, que perdió el control del auto mientras intentaba evadir a los paparazzi.
Las nuevos datos se desprenden de la investigación del prestigioso doctor Richard Shepherd, convocado en 2004 para develar lo que realmente ocurrió aquella noche en que perdieron la vida, además, el chofer y Dodi Al-Fayed, el novio de la princesa.
Después de 15 años, Shepherd publicará el libro Causas no naturales. Allí contará, por primera vez de forma pública, que la muerte de la exesposa de Carlos de Inglaterra se desencadenó a partir de una "pequeña herida" y que el factor "mala suerte" incidió como para que su cuadro se agravara.
Leé tambiénTheresa May insiste en que el Brexit sólo será posible si hay un acuerdo con la oposición"Su lesión fue tan rara que en toda mi carrera creo que no he visto otra igual. La de Diana fue una lesión muy pequeña, pero en el lugar equivocado", explicó Shepherd a forma de adelanto en el periódico inglés The Mirror.
Según el especialista, si Lady Di hubiese tenido puesto el cinturón de seguridad, solo se hubiera golpeado contra el asiento de adelante, en un ángulo diferente y eso podría haber evitado su muerte. También concluyó que, si hubiera recibido la asistencia médica más rápido, podría haber sobrevivido.
El médico explicó que el corte que sufrió en una vena fue tan pequeño que ella logró mantenerse lúcida y comunicarse por algún tiempo. Eso motivó que no fuera trasladada al hospital de la Pitié-Salpêtrière con la urgencia que merecía el caso.
"La vena desgarrada sangró lenta e internamente en su pecho. Eso generó que fuera perdiendo en forma gradual el conocimiento mientras la llevaban en la ambulancia", detalló. Cuando llegó al hospital, fue sometida a una intervención quirúrgica, pero murió poco después.
El doctor Shepherd estuvo de acuerdo en que fue un trágico accidente. Los investigadores involucrados gastaron tres millones de libras, examinaron el Mercedes en el que viajaba y visitaron el lugar del accidente. Para dar el resultado, reunieron alrededor de 1500 declaraciones de testigos y 20000 documentos.