Los ex primer ministros Paolo Gentiloni y Enrico Letta coincidieron en reclamar un paso al costado de Salvini, luego de la denuncia de que podría haber recibido financiamiento ruso encubierto en una operación de venta de petróleo.
Figuras de la oposición pidieron hoy la renuncia del vicepremier y ministro del Interior de Italia acusado esta semana de haber recibido aportes rusos a su campaña para las elecciones europeas de mayo pasado.
Los ex primer ministros Paolo Gentiloni y Enrico Letta coincidieron en reclamar un paso al costado de Salvini, luego de la denuncia de que podría haber recibido financiamiento ruso encubierto en una operación de venta de petróleo.
"Quien dice falsedades para cubrir mentiras y mentiroso no puede ser el ministro de Interior de un gran país democrático", planteó hoy Gentiloni en su cuenta de Twitter, en línea con declaraciones de Letta al diario Repubblica, que acusó a Salvini de dañar a Italia".
El endurecimiento de la posición de Gentiloni se dio después de que una nota del premier Giuseppe Conte confirmara hoy que fue el equipo de Salvini el que invitó a una cena con el presidente ruso, Vladimir Putin, el 4 de julio al lobbista Gianluca Savoini, el hombre señalado como el supuesto negociador de los aportes electorales rusos.
Las acusaciones contra Salvini, líder de la derechista Liga Norte y admirador de Putin, explotaron cuando el portal online estadounidense BuzzFeed News publicó el audio de la supuesta conversación entre empresarios rusos e italianos en una operación de venta de petróleo con un descuento especial de 65 millones de dólares, supuestamente destinados a financiar la campaña del ministro del Interior.
Antes, en febrero, la revista L"Espresso había publicado parte de la información acusando a Salvini de recibir "millones de euros" de socios rusos para financiar las actividades partidarias.