Pese a la aceleración que hubo en diciembre, los tenedores de dólares perdieron rentabilidad. Plazo fijo, acciones, bonos Bitcoin y oro, bajo la lupa
El 2024 concluyó con el plazo fijo UVA y las acciones del Merval liderando las ganancias entre las alternativas de inversión, en un contexto de alta volatilidad. Un millón de pesos invertidos en un plazo fijo UVA a principios del año se transformaron en $2.835.258 para diciembre, superando en un 30% la inflación acumulada y logrando una ganancia adicional de más de $1,8 millones.
Por su parte, el índice Merval generó rendimientos significativos, llevando un capital inicial de $1 millón a $2.750.000, gracias al alza en sectores clave como el bancario. El Bitcoin, en tercer lugar, escaló un 144%, mientras que las inversiones dolarizadas perdieron poder adquisitivo frente a otras alternativas.
Los analistas coinciden en que el plazo fijo UVA no repetirá su desempeño excepcional debido a la desaceleración inflacionaria. Se espera mayor paridad entre este instrumento y los tradicionales, con rendimientos moderados pero positivos frente a la inflación.
Las acciones bursátiles continuarán siendo atractivas, especialmente en sectores energéticos y de servicios, beneficiados por inversiones y un contexto global favorable. Además, activos como el oro y el Bitcoin tendrán un comportamiento más prudente, dependiendo del mercado internacional y la estabilidad del dólar.
En el mercado de renta fija, expertos destacan bonos soberanos como el Global 2038 (GD38), con un potencial de suba del 18% en dólares. También recomiendan títulos como el Bonar 2035 (AL35) y Bopreal 2026 (BPY26), respaldados por expectativas de mejoras en la economía argentina y un plan gubernamental de reactivación.
El 2025 plantea un escenario más equilibrado, con oportunidades en sectores estratégicos y menor dispersión de rendimientos entre opciones de inversión.