El Gobierno prepara una reducción del Impuesto PAÍS a las importaciones del 17,5% al 7,5% en septiembre, medida que se oficializaría mediante una resolución firmada por el ministro de Economía, Luis Caputo, en el Boletín Oficial. "El impuesto PAÍS es muy dañino. En septiembre lo bajamos al 7,5%. Eso va a tener un impacto en la inflación. El oficial se mantendrá igual", adelantó Caputo en julio.

La baja del impuesto se aplicará a las importaciones, pero no afectará la compra de dólares oficiales para ahorro ni los gastos en el exterior, que seguirán con una percepción del 30% hasta el 31 de diciembre de 2024, según la ley vigente desde 2019. Con esta reducción, el precio del dólar para importadores disminuirá de $1.116 a aproximadamente $1.021, lo que podría incentivar un aumento en las compras internacionales.

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Además, se espera que la medida reduzca la inflación mayorista al bajar los costos de productos importados y alivie la presión sobre los dólares financieros. Según datos de la consultora Outlier, el impuesto PAÍS representó el 20,3% de los ingresos fiscales en los primeros siete meses de 2024, mientras que los derechos de exportación aportaron un 8%.

A pesar del alivio para importadores, la reducción del impuesto plantea desafíos para el Tesoro, que perderá una significativa fuente de ingresos, crucial para mantener el superávit fiscal. En julio, la recaudación del impuesto PAÍS fue de $698.351 millones.