Esta decisión se produce después de que el gobierno de Javier Milei desconociera los resultados de las elecciones en las que Nicolás Maduro fue proclamado presidente.
El régimen chavista de Nicolás Maduro ha comunicado a la Cancillería argentina que los integrantes de la embajada argentina en Venezuela tienen un plazo de 72 horas para abandonar el país. Esta decisión se produce después de que el gobierno de Javier Milei desconociera los resultados de las elecciones en las que Nicolás Maduro fue proclamado presidente.
La notificación fue enviada este lunes al Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de Argentina, dirigido por la ministra Diana Mondino. Este desarrollo intensifica la ruptura de relaciones entre ambos países.
El documento del gobierno venezolano acusa a Argentina de "acciones y declaraciones injerencistas" tras los comicios del domingo. En el comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela exige el retiro de los diplomáticos argentinos, otorgándoles un plazo de 72 horas desde la fecha de la notificación.
El personal diplomático argentino recibirá garantías para su retirada inmediata del territorio venezolano. Sin embargo, la medida no afecta a los seis venezolanos asilados en la embajada argentina en Caracas. La nota oficial aclara que esta situación es independiente de la presencia de los ciudadanos venezolanos, que deben ser gestionados por la embajada argentina bajo el principio de extraterritorialidad consagrado en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961.
La primera víctima identificada es Rancés Yzarra, de 30 años, quien habría recibido un disparo durante una manifestación en Maracay, estado Aragua, en la madrugada del lunes.
En las últimas 48 horas, la tensión diplomática entre Argentina y Venezuela ha aumentado. Javier Milei desconoció el resultado de las elecciones y aumentó sus declaraciones contra Nicolás Maduro. Por su parte, la canciller Diana Mondino ha activado contactos con ministros de Relaciones Exteriores de otros países, logrando un comunicado conjunto en el que se exigió una revisión completa de los resultados electorales con observadores independientes. Además de Argentina, el comunicado fue respaldado por Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay.