Cada cierto tiempo aparece una película con una premisa tan alocada que lo más habitual es que se pasen de frenada y acaben siendo tonterías sin demasiado interés.
El propio título de la película deja muy claro qué podemos esperar de ella a nivel argumental: Calvin Barr, el hombre que acabó con la vida de Adolf Hitler, lleva una vida apacible en 1987 cuando el FBI y la policía montada de Canadá requieren de sus servicios para que acabe con el temible bigfoot, ya que ellos sí están al tanto de ese gran secreto que ha tenido que ocultar al resto del mundo.
Exhibida durante el pasado Festival de Sitges, "The Man Who Killed Hitler and then The Bigfoot" es el primer largometraje de Robert D. Krzykowski, quien ha sido apadrinado desde la producción por Lucky McKee, el responsable de cintas como "May", "El bosque maldito" o "The Woman". Curiosamente, Krzykowski ejerció a su vez como productor de esta última.
El otro gran reclamo de "The Man Who Killed Hitler and then The Bigfoot" además de su argumento es la presencia en su reparto de Sam Elliott, veterano intérprete al que pudimos ver hace poco en "Ha nacido una estrella", cinta por la que probablemente consiga una nominación al mejor actor de reparto en los próximos Óscar. Eso sí, aquí no está tan bien acompañado como en la película de Bradley Cooper, ya que junto a él están Aidan Turner, Ron Livingston o Ellar Coltrane.