Captan el primer objeto interestelar con agua que no es del Sistema Solar
Los científicos de la NASA sospechan que el objeto interestelar se originó en un sistema solar con al menos un planeta como la Tierra.
Jueves, 31 de Octubre de 2019
Un equipo de investigadores de la NASA estuvo analizando el cometa 2I/Borisov, proveniente de un lugar a 13 años luz de la Tierra, y acaban de descubrir que lleva una gran cantidad de agua.
Según señala la revista Nature, los científicos, dirigidos por Adam McKay, astrónomo del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA (Estados Unidos), siguen el recorrido de 2I/Borisov, que se dirige hacia el Sol proveniente de fuera del Sistema Solar.
El equipo tomó observaciones espectroscópicas para tratar de determinar la cantidad de agua que transporta el Borisov (llamado así en honor a su descubridor). Durante 1800 segundos, examinaron la composición química de los gases a través de la forma en que se reflejaba la luz del Sol en el cometa.
Los científicos se dieron cuenta que gran parte de la luz se reflejaba en vapor de agua, por lo que determinaron que el cometa arrojaba 113 x 10 elevado a la potencia de 23 (veintitrés ceros) litros de agua por segundo. Una cantidad colosal. Asimismo, los científicos determinaron que el área que produce agua es de 1.7 kilómetros cuadrados.
"Hay agua, eso es genial, eso es genial", ha señalado Olivier Hainaut, astrónomo del Observatorio Europeo Austral en Garching (Alemania). En palabras de este científico, el descubrimiento no es sorprendente, porque la mayoría de los cometas contienen mucha agua; no obstante, confirmar su presencia en un cometa interestelar es un paso importante hacia la comprensión de cómo el agua podría viajar a través de las estrellas.
2I/Borisov está siendo monitorizado con gran atención desde su descubrimiento el 30 de agosto, porque la trayectoria del cometa muestra que proviene de fuera del Sistema Solar, no como la mayoría de los cometas. Se trata del segundo objeto interestelar jamás descubierto, después de Oumuamua, que lo fue en 2017.
En diciembre pasará muy cerca del Sol y los científicos podrán recoger muchas más evidencias
Según los datos que manejan los científicos, 2I/Borisov se formó alrededor de una estrella distante y desconocida hace millones de años. Posteriormente, algo debió sacarlo de su órbita y lo ha enviado a “visitarnos”.
Los astrónomos detectaron oxígeno en el cometa hace unas semanas y esa fue la primera señal importante. Aunque el oxígeno puede producirse en un cometa de maneras distintas, lo más probable es que el agua se esté descomponiendo en hidrógeno y oxígeno.