Luego de varios días de desencuentros, Mauricio Macri y Javier Milei se reunieron el viernes por la noche en una cena social. El encuentro, que se celebró en la casa de un periodista, fue la primera vez que los dos líderes políticos se veían en un contexto informal.
La cena, que duró tres horas y media, estuvo amenizada por la presencia de las parejas de ambos líderes políticos, Juliana Awada y Fátima Florez. Según fuentes presentes, la conversación fue "muy agradable" y se centró en los desafíos que enfrentará el nuevo gobierno de Milei.
El encuentro se produjo un día después de que se confirmara la designación de Patricia Bullrich como ministra de Seguridad. La noticia había generado malestar en Macri y otros dirigentes del PRO, que consideran que Bullrich se había dedicado a negociar cargos para sí misma y su entorno sin considerar al partido.
Macri había expresado su descontento con la designación de Bullrich, pero la celebró como una decisión personal. Sin embargo, el ex presidente repitió que se veía afuera de cualquier negociación del PRO con el presidente electo.
En la cena, Macri también expresó su preocupación por el rumbo de los nombramientos que había comunicado Milei hasta ese momento. El ex presidente se quejó de que Milei se estaba rodeando de peronistas, entre ellos Guillermo Francos, el futuro ministro del Interior.
Según fuentes del macrismo, la cena terminó descontracturando un momento de tensión, pero no modificó la situación: Macri seguirá estando afuera de la toma de decisiones y el ingreso de funcionarios al nuevo gobierno seguirá estando sujeto a decisiones personales.