Raúl Torre, perito criminalista que participó en la investigación del crimen de Nora Dalmasso en 2006, expresó su satisfacción al conocerse que Roberto Bárzola, pulidor de pisos contratado por la familia Macarrón, es el principal sospechoso tras confirmarse la compatibilidad de su ADN con muestras halladas en la escena del crimen. Torre destacó que la hipótesis planteada en el juicio junto con Osvaldo Raffo ahora tiene un nombre concreto, aunque lamentó que el caso esté prescripto, lo que impide avanzar hacia una condena.

El perito recordó detalles de la escena del crimen, señalando que las lesiones halladas en el cuerpo de Dalmasso eran claras evidencias de un ataque sexual, descartando la posibilidad de consentimiento. Además, subrayó que la causa de muerte fue por estrangulamiento manual, seguido de un doble lazo en el cuello para asegurar el desenlace fatal. Según Torre, tanto peritos oficiales como el FBI coincidieron en que se trataba de un delito sexual y apuntaron a un depredador como el responsable.

Torre criticó la dirección inicial de la investigación, que acusó a Marcelo Macarrón, esposo de Dalmasso, de ser el autor intelectual del crimen. Durante el juicio, teorías como el uso de un avión privado para viajar desde Uruguay y cometer el asesinato fueron calificadas por el perito como "de Hollywood". Según Torre, la Justicia en Córdoba fue influida por intereses políticos, desviando el caso durante años.

Finalmente, Torre elogió al Ministerio Público Fiscal de Córdoba por reconocer sus errores y encaminar la investigación. Aunque Bárzola ha sido imputado y llamado a indagatoria, el perito consideró que aún se buscan elementos para condenarlo, incluso si no es por el crimen.