Autoridades del Servicio Penitenciario provincial informaron que la convocatoria a postulantes para el curso de aspirantes a agentes penitenciarios de seguridad continúa desarrollándose y habrá dos semanas más para que los interesados puedan presentar la documentación correspondiente.

Los requisitos solicitados son: ser mayor de 18 años y tener hasta 34 años cumplidos al 31 de diciembre de 2019, ser residente en la provincia de Mendoza y no contar con antecedentes penales ni judiciales.

Los postulantes deberán presentarse de 8 a 16 en el Instituto de Formación Penitenciaria (INFOPE), ubicado en las inmediaciones del Complejo Boulogne Sur Mer. En San Rafael, las inscripciones serán en Mitre 2012, donde se ubica la cárcel de ese departamento. Los interesados deberán llevar consigo el Documento Nacional de Identidad, la partida de nacimiento y el certificado analítico definitivo, con certificación otorgada por el Poder Judicial de la provincia. Toda esta documentación original debe presentarse acompañado de una fotocopia, que formará parte del legajo.

El objetivo de esta convocatoria es incorporar 80 nuevos agentes penitenciarios hombres y 20 mujeres para que cumplan funciones de seguridad en los distintos complejos y unidades carcelarias de toda la provincia.

“Hemos tenido una gran convocatoria. Es por este motivo que ampliamos no sólo el número de cargadores, sino que ya hemos comenzado con el proceso de evaluación para agilizar la selección de los que finalmente quedarán para comenzar el curso. Estos resultados los tendremos recién una vez finalizada la recepción de documentación de todos los interesados, por lo que hay tiempo para acercarse”, expresó Gastón Meli, coordinador de Recursos Humanos del Servicio Penitenciario.

Meli informó además: “Hemos recibido muchas consultas debido a que hubo información falsa sobre los requisitos o la documentación a presentar, por lo que se decidió que, además de publicar el llamado en los medios gráficos, esté disponible en la página oficial del Servicio Penitenciario y del Ministerio de Seguridad”.

Proceso de evaluación y selección de aspirantes

Los encargados de la convocatoria informaron, además, que una vez presentados los papeles, comienza el proceso de evaluación. En primer lugar, se debe rendir un examen psicotécnico a cargo de psicólogas del Servicio Penitenciario, luego un examen psicofísico y, por último, un examen sobre cultura general.

Los que pasen estas evaluaciones y sean seleccionados como aspirantes a agentes penitenciarios de seguridad comenzarán un curso que durará aproximadamente hasta marzo de 2020, para preparar e instruir a los futuros penitenciarios.

“La necesidad de incorporar personal de seguridad radica en que contábamos prácticamente con el mismo personal desde 2015, pero con todas las inauguraciones que hemos tenido en este último tiempo y las que tendremos en los próximos meses en materia edilicia, resulta necesaria esta incorporación. A pesar de esto, creemos que hemos optimizado muy bien el recurso humano con el que contamos hasta hoy”, informó Orellana.

El Servicio Penitenciario provincial cuenta con aproximadamente con 4.900 personas privadas de libertad alojadas en complejos, unidades y alcaidías de toda la provincia, a las que se suman las casi 600 que cuentan con el beneficio de prisión domiciliaria.

En cuanto al personal, la institución carcelaria posee una planta de personal de 2.615 efectivos, de los cuales 2.042 conforman el escalafón de seguridad. El resto pertenece al cuerpo de profesionales y administrativos, entre los que se encuentran médicos, psicólogos, abogados.

“La expansión del Servicio Penitenciario, con la construcción de nuevos espacios, como las alcaidías contravencionales en Malargüe y General Alvear y la forma en que la institución se ha ido interrelacionando con la sociedad y cambiando su imagen, ha hecho que no sólo haya interesados por ingresar en distintos puntos de la provincia, sino también que la cantidad de personas sea mayor a cuando la cárcel era noticia en los medios por cuestiones negativas”, expresó Orellana.