Esta clínica estatal en el sur de Moscú está equipada con refrigeradores especiales que mantienen la temperatura exactamente a -24 grados centígrados para conservar la vacuna Sputnik V.

Mientras se descongela, el paciente pasa un chequeo médico. Mayores de 60 años, personas con enfermedades crónicas y embarazadas o en período de lactancia no podrán vacunarse.

Tras esta primera dosis los vacunados deberán regresar dentro de 3 semanas para un segundo pinchazo. En este folleto están detallados los posibles efectos secundarios.

Natalia Shindryaeva es médica jefa del policlínico estatal N2:

«En las primeras 24 horas pueden tener malestar o debilidad ... Incluso algunas décimas de fiebre. Aunque no es frecuente, explica la doctora Shindryaeva

Sputnik V se distribu ye ya, a pesar de que los ensayos clínicos aún no se han completado. Una de cada seis personas experimentó efectos secundarios en los ensayos iniciales. Los médicos explican que la inmunidad puede tardar hasta 40 días en producirse, por lo que advierten a la gente que evite los espacios públicos después de la vacunación.

"Si el Gobierno ruso recomendó esta vacunación masiva, yo seré uno de los que la apoyen plenamente. Para mí es muy importante trabajar seguro y proteger tanto a la gente de la tercera edad como a mis alumnos. Y evitar que nadie tenga ningún problema o molestia", dice Kozlov Dmitry, profesor y trabajador social.

"No se pueden comparar los efectos secundarios de la vacuna con los síntomas de la infección por coronavirus, asegura Aleksey, administrado de la Universidad Judía de Moscú.

Pero en Rusia, no todos son tan entusiastas con Sputnik V. Según una reciente encuesta, la mayoría de los rusos no cree que sea necesario vacunarse contra la COVID-19. Según los laboratorios que desarrollan la vacuna, Sputnik V tiene una efectividad del 95 por ciento. Una de las principales dificultades es la capacidad de fabricación. De aquí a finales de año, solo se podrán producir 2 millones de dosis.