Autoridades del PAMI se presentaron en el Hogar San Lucas, de Parque Avellaneda, tras el reclamo de los familiares de los adultos mayores, quienes se encuentran aislados, a la espera de ser derivados
Este mediodía, un grupo de familiares de adultos mayores del hogar San Lucas, un geriátrico del barrio porteño de Parque Avellaneda, se congregó frente al establecimiento para reclamar que los 45 residentes fuesen trasladados. El pedido se originó tras la confirmación de que una persona murió por coronavirus en ese lugar y otras siete están contagiadas.
“Confirmamos una muerte y siete personas contagiadas”, sostuvo a la prensa Mónica Roque, secretaria de Derechos Humanos, Gerontología Comunitaria, Género y Políticas de Cuidado del PAMI, antes de ingresar al geriátrico privado, el cual posee convenio con la obra social de jubilados y pensionados.
“Es un lugar privado, no tenemos gobernabilidad sobre el, y tiene que estar habilitado y regulado por la ciudad de Buenos Aires. La autoridad que regulan los geriátricos son las jurisdicciones. Con nuestros afiliados, frente al primer caso positivo, estuvimos presentes, dimos acompañamiento, aislamos a ocho personas de las cuales siete son positivas y una tiene el test pendiente. Brindamos viandas y la desinfección del lugar, en el cual viven 45 personas. Tenemos que informar a otras obras sociales”, explicó a TN Eduardo Pérez, coordinador del PAMI, previo a anunciar el traslado de los mismos.
El sábado pasado, cerca de las 17.30, dos móviles de la Policía de la ciudad de Buenos Aires se presentaron en el geriátrico, ubicado en Medina 1650, luego de que el hijo de una persona que vive allí denunciara que en el lugar varios adultos mayores presentaban síntomas compatibles con el COVID-19. Previo al arribo policial, varias ambulancias del PAMI trasladaron a seis personas para realizarles los hisopados correspondientes. Tres fueron llevadas al Hospital Italiano, dos al Piñeiro y uno al de Clínicas.
Fuente: Infobae