El proyecto fue debatido en un plenario de comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y de Presupuesto y Hacienda de la cámara baja y recibió dictamen de mayoría.
El proyecto de ley de financiamiento de los partidos políticos, que levanta la prohibición para que las empresas privadas puedan aportar a las campañas y establece la bancarización del sistema, recibió hoy dictamen de mayoría en un plenario de comisiones de la Cámara de Diputados y será debatido el próximo 8 de mayo en el recinto de la cámara baja.
De hecho, la cámara baja allanó ayer el camino para que el proyecto sea tratado en la próxima sesión cuando aprobó en el recinto una preferencia para que la iniciativa que cuenta con sanción del Senado, pueda ser convertida en ley finalmente en la próxima sesión del cuerpo.
Desde Cambiemos, los diputados de la CC, Paula Oliveto, Marcela Campagnolli y Juan Manuel López firmaron también en disidencia el dictamen, ya que la fuerza liderada por Elisa Carrió se opone a habilitar que las empresas puedan aportar a las campañas aunque aún no definieron cómo votarán en el recinto cuando el proyecto sea debatido en particular.
En tanto, el FPV-PJ –que en el Senado se ausentó del recinto al momento de la votación del proyecto- anticipó por su parte que presentará dictamen propio.
Al abrir el plenario, el presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales, PabloTonelli (PRO) precisó que, entre las modificaciones más importantes, el texto contempla “la admisión de los aportes de personas jurídicas para el financiamiento de las campañas”, al recordar que la ley actual establece “el aporte de personas jurídicas para el desarrollo institucional de los partidos pero no para la campaña”.
Otro de los puntos centrales, explicó Tonelli, es que a través del texto se extiende el plazo de duración de la campaña (hasta ahora es 35 días antes el proceso) y se establece que comience 50 días antes de los comicios pero, dijo, “también hace más largo el período durante el que el gobierno no puede hacer anuncios de obras” (ahora es de 15 días y con esta norma se extiende a 25 días) e incluye la regulación de la publicidad electoral digital.
Asimismo, puso de relieve que el proyecto reduce del 10% al 5% el tiempo total de programación audiovisual con fines electorales, a la vez que aumenta el aporte para impresión de boletas por parte del Estado, que pasará del 1,5 por elector al 2,5.
Desde el FPV-PJ, Maria Emilia Soria anticipó el rechazo de ese bloque al texto, al sostener que se trata de una ley “a medida de Cambiemos” porque “no garantiza la pluralidad y transparencia” y se pronunció a favor eliminar el aporte de las personas jurídicas y mantener la regla actual.
El plenario tuvo fuertes cruces, que incluyó gritos y chicanas que protagonizaron Carlos Castagneto (FPV-PJ) y el macrista Fernando Iglesias, y que obligaron a Tonelli (PRO) a llamar al orden a los diputados en varias ocasiones.
Castagnetto, que increpó de pie a Iglesias por “interrumpir” a María Emilia Soria cuando exponía su rechazo al texto, pidió a Tonelli que pusiera orden: “Estamos cansados de este hombre, hace gestos, no aporta nada en el Congreso”, insistió el bonaerense.
A su turno, Iglesias defendió el proyecto y volvió a generar el rechazo a los gritos de los diputados de FPV-PJ cuando sostuvo que “la regla kirchnerista” de no permitir el aporte de empresas por ley “terminó en la causa de los cuadernos” y subió la apuesta, al advertir que le “gustaría” saber sobre los “aportes de la efedrina” en la campaña presidencial de 2007 de Cristina Fernández de Kirchner.