El consumo de yerba mate en Argentina sufrió una caída del 8,8% en los primeros nueve meses de 2024, alcanzando el nivel más bajo de los últimos nueve años. Según datos del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el consumo interno bajó de 212 mil toneladas entre enero y septiembre de 2023 a 193,4 mil toneladas en el mismo periodo de este año, debido principalmente a la pérdida de poder adquisitivo.

CEPA también reportó que las exportaciones de yerba mate cayeron un 16,4% interanual, con mermas en mercados como la Unión Europea y Asia, donde la yerba había ganado terreno en años recientes. A esta baja en consumo y exportación se suma un incremento en la cosecha, lo cual ha provocado un aumento en los stocks de los secaderos.

Además, la relación entre el precio recibido por los productores y el precio en góndola sigue empeorando, con los primeros captando apenas un 5,7% del valor final, el nivel más bajo desde 2019. CEPA destacó que las importaciones de yerba de Paraguay y Brasil, que aumentaron un 149% respecto al año anterior, también afectan al sector, ya que ingresan a precios inferiores a los del mercado local.

La combinación de caída en consumo y exportaciones, junto con una mayor oferta interna, ha puesto a los productores en una situación crítica, afectando los precios de la materia prima y generando un impacto económico negativo en el sector.