El defensor Marcos Rojo confesó hoy que descartó una propuesta de Boca pese al llamado del vicepresidente segundo, Juan Román Riquelme, porque apunta a poder renovar el préstamo con Estudiantes de La Plata, donde llegó cedido en enero pasado desde Manchester United, dueño de su pase, pero sólo pudo jugar un partido.
"La idea mía era quedarme en Argentina, quiero seguir en Estudiantes. Pero pasó algo: me llamaron de Boca para ver qué tenía pensado hacer y al principio me movió", aseguró el defensor. En declaraciones a Fox Sports, agregó: "Me llamó Román a mí.
Estaba re emocionado, es un ídolo, mi viejo es fanático de Boca.
Crecí viéndolo a él. Hablamos y le comenté la situación, quedamos en hablar".
Pero enseguida, cerró rápidamente la historia: "Después lo pensé bien y le dije que no era el momento de hacer un paso a Boca".
Las razones, según explicó el defensor de 30 años, radican en cómo lo recibieron los hinchas de Estudiantes cuando decidió retornar a La Plata, tras un largo recorrido en Europa.
"La gente de Estudiantes que me recibió como un ídolo, me abrieron las puertas. No puedo irme ahora a Boca habiendo jugado un solo partido, no hablaría bien de mí".
Rojo enfrentó a Defensa y Justicia (1-2) en febrero pasado, se desgarró y el receso por la pandemia de coronavirus hizo que no pueda volverse a poner la camiseta del "Pincha".
El pase del argentino cuesta 15.000.000 de dólares, dinero que Estudiantes no puede afrontar, más en el contexto de crisis por la inactividad del fútbol.
Pese a haber rechazado la propuesta que le hizo el vicepresidente de Boca, el defensor subcampeón del mundo con la Selección no le cerró las puertas para un futuro.
"En un futuro nunca se sabe. Hoy en día quiero jugar en Estudiantes ?y si sigo, será acá. Pero más adelante no se sabe.
No quiero decir "no, no, no" y después hacerlo porque quedaría mal", cerró Rojo.