El tandilense, quien comenzó hoy su participación en Roland Garros con una victoria frente al chileno Nicolás Jarryros, consideró que a diferencia del 2018, cuando fue semifinalista, se siente "un poco más viejo" y "más roto".
"Estoy un poco más viejo, más roto", bromeó Del Potro después de su triunfo por 3-6, 6-2, 6-1 y 6-4 sobre el chileno, con un rendimiento de menor a mayor.
"Me costó entrar en juego en el primer set. La lluvia, el viento, él que le pegaba fuerte... Pero a partir del segundo me sentí mejor, saqué bien y pude ganarlo", comentó el tandilense en la rueda de prensa que ofreció luego de su debut.
Con respecto a que perdió el set inicial, como le había sucedido también en 2018, el tandilense manifestó que "es el mismo comienzo. Ojalá tenga un final similar porque fue un gran torneo para mí. Pero hoy soy consciente del estado en que me encuentro".
"Sabemos que estos torneos son parte de la recuperación según lo planificado con los médicos. No hay que tener las expectativas muy altas sino cuidar la rodilla y la salud para tener objetivos más importantes en el segundo semestre del año", aseguró Del Potro, que jugará su próximo partido ante el japonés Yoshihito Nishioka.
Además, resaltó que lo que le importa es "disfrutar de volver a jugar al tenis nuevamente".