Hernán Giardini, coordinador de la campaña de bosques de Greenpeace, advirtió sobre la gravedad de la situación al afirmar que el incendio podría extenderse hasta abril.
Desde el 26 de diciembre, los incendios continúan devastando el Parque Nacional Nahuel Huapi, donde más de 4.000 hectáreas de bosque nativo han sido consumidas por las llamas. El fuego, que se originó tras una tormenta eléctrica el 16 de diciembre, se mantiene activo en diversas zonas críticas, incluyendo Cerro Colorado, Laguna Quetro y Las Melisas. Allí, cientos de brigadistas luchan contra el avance de las llamas utilizando herramientas manuales y apoyo aéreo.
Hernán Giardini, coordinador de la campaña de bosques de Greenpeace, advirtió sobre la gravedad de la situación al afirmar que el incendio podría extenderse hasta abril. También alertó sobre el peligro de que el fuego alcance áreas urbanas, como ocurrió recientemente con un domo incendiado en el Cerro Otto, donde las llamas estuvieron a punto de llegar a los bosques cercanos al centro de Bariloche.
Las condiciones del terreno complican aún más las tareas de los brigadistas, especialmente en zonas de difícil acceso como la Reserva Estricta del parque. Además, Giardini señaló que "el 95% de los incendios en la Patagonia tienen causas humanas, desde fogatas mal apagadas hasta actos intencionados". También criticó la falta de un sistema de prevención adaptado a la crisis climática y subrayó la necesidad urgente de reforzar los equipos de brigadistas e infraestructura para enfrentar este tipo de emergencias.