Más allá de las relaciones tradicionales, ¿cuáles son las técnicas ancentrales para mejorar el rendimiento?
Existe una forma de practicar sexo más allá de lo tradicional y la clave está en relajarse: el sexo tántrico.
Este tipo de sexo se basa en técnicas ancestrales que enseñan a trasladar la energía sexual a todo el cuerpo y crear con la pareja un circuito que los recarga a ambos. Es una práctica que va más allá de lo físico, según indicó María Lucía Banker, maestra tántrica.
Además, Banker indicó. “Quien practica sexo tántrico deja de tener orgasmos genitales para convertirse en un ser orgásmico, es decir, experimenta un orgasmo de cuerpo completo”. Agregó que cualquier persona puede experimentar el sexo tántrico, sólo hay que abrir la mente.
“En muchas ocasiones las personas no experimentan nuevas cosas, ya sea por el prejuicio o por mitos”, dijo la especialista colombian. “Para abrir la mente, es clave aceptar que nos queda mucho por aprender. Investigar, leer sobre el sexo tántrico o permitirse vivir la experiencia para verificar lo que se siente”, explicó.
Una de las claves del éxito del sexo tántrico está en la relajación. Según Banker, la energía no puede circular en un cuerpo tenso o estresado. Es fundamental aprender a relajar el cuerpo, pero sobre todo, a deshacerse de nudos o tensiones musculares.
A la hora de tener una sesión de sexo, si la persona se encuentra relajada, puede disfrutar más de cada pequeño detalle, saborear más minuciosamente cada momento y gozar intensamente de cada experiencia, expresó Antonio Murillo, psicólogo sexólogo, coach sexual y responsable del Grupo de Trabajo de Psicología, Sexología y Pareja de la Delegación de Córdoba del Colegio Oficial de la Psicología de Andalucía.
La idea, por lo tanto, no es tener sexo para relajarse sino relajarse para tener sexo. “El sexo tradicional relaja por el solo hecho de producir hormonas que son muy beneficiosas para la salud como la oxitocina o la dopamina, químicos potentes producidos de manera natural por nuestro sistema endocrino y que sirve para la relajación”, afirmó Banker.
Murillo añadió que la experiencia sexual, sobre todo los orgasmos, “implican una descarga de tensión, tanto muscular como mental, lo cual puede ayudar a relajarse tanto física como psicológicamente”. En tanto, la experta señaló que quienes practican tantra, pueden experimentar más placer que quienes no lo practican porque los circuitos de su sistema nervioso han sido preparados para recibir sensaciones más potentes.
Sobre si existen unas posturas determinadas para practicar sexo tántrico y conseguir más placer, la experta recuerda que hay tantas como el kilometraje que nos dé la imaginación, pero no se debe caer en la creencia falsa de que la cantidad de posturas es lo que hace un buen sexo. Para Banker, no es la cantidad de técnicas o posturas que practiquemos, es el nivel de consciencia con que lo hagamos.
En cuanto a la duración en este tipo de práctica sexual, también advierte de que es un cliché pensar que el sexo tántrico consiste en cuánto puedes durar en una relación sexual. En su opinión, “la duración es lo de menos”.