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Los problemas venosos son progresivos y sin el tratamiento adecuado pueden llegar a ser invalidantes. Por ello, especialistas del Hospital de Clínicas llevarán a cabo el “circuito de salud para tus piernas” que buscará concientizar a la población acerca de los problemas circulatorios más comunes y brindar un diagnóstico precoz
Los problemas venosos son progresivos y sin el tratamiento adecuado pueden llegar a ser invalidantes. Por ello, especialistas del Hospital de Clínicas llevarán a cabo el “circuito de salud para tus piernas” que buscará concientizar a la población acerca de los problemas circulatorios más comunes, brindar un diagnóstico precoz y un seguimiento para su posterior tratamiento.
“La función del sistema venoso es asegurar el retorno al corazón de la sangre. Esto lo hace en los miembros inferiores desde abajo hacia al corazón y desde la superficie a la profundidad. En algunas situaciones de enfermedad, va a ocurrir una acumulación de sangre en las venas, ya sea por afección de las paredes de las venas o del aparato valvular que hay en su interior. En estos casos, las venas se van a dilatar, va a aumentar la presión venosa en ese segmento y van a aparecer alteraciones en los tejidos circundantes, dando lugar a la aparición de los signos y síntomas de la enfermedad venosa”, explica la doctora Mabel Bussati (M.N. 57.716), médica de la división de Cirugía Venosa y Linfática del Hospital de Clínicas.
En esta línea, resalta que los problemas venosos tienen una “alta incidencia” en la población, sobre todo en personas entre los 30 y 60 años, al tiempo que repercuten en la calidad de vida de los pacientes, ya que “son progresivos y sin el tratamiento adecuado pueden llegar a ser invalidantes”. Además, plantea que “tienen una alta repercusión económica y social y pueden constituirse en un problema de salud pública”.
En cuanto a la prevención de los trastornos venosos crónicos, indica que “se puede evitar la aparición de los signos y síntomas o, cuando ya está instalada la enfermedad, evitar la progresión de la misma”. Aquí diferencia los factores de riesgo que podemos modificar de los que no.
Respecto a los factores que no podemos cambiar, se incluyen el sexo, la edad, la raza y la genética. “Las afecciones venosas predominan en las mujeres en una relación de 4 a 1 debido a la aparición de la menstruación, los embarazos, la menopausia, es decir, el factor hormonal de estrógenos y progesterona. Las terapias hormonales sustitutivas y la anticoncepción son factores que también predisponen a esta situación”, precisa Bussatti.
La cartera de Salud de la Nación difundió una serie de recomendaciones frente al aumento sostenido de casos y reveló una serie de falsas creencias sobre el dengue y el chikungunya.
En el caso de la edad, “el proceso de envejecimiento debilita las paredes venosas por disminución del colágeno e inciden en la aparición de las varices”, mientras que al profundizar en el factor del origen, señala que es menos frecuente la patología venosa en negros y asiáticos
“También es fundamental la herencia, ya que cuando un solo progenitor posee varices, en el 25% de los hombres puede aparecer la enfermedad venosa, mientras que esta cifra asciende al 62% en el caso de las mujeres. En cambio, cuando los dos progenitores tienen varices, este porcentaje aumenta al 90%. Sin historia familiar, las personas pueden padecer la enfermedad en un 20%”, añade.
Ahora bien, los factores que sí podemos modificar son la obesidad, “que la definimos por el índice de masa corporal y que conlleva la aparición de comorbilidades”; el sedentarismo porque “es bien conocido el rol que cumplen las bombas musculares en el retorno venoso”; así como también es importante cuidarnos de la exposición solar; la constipación; la exposición a fuentes de calor artificiales; los esfuerzos bruscos; los ejercicios de alto impacto y con complemento de pesas. A su vez, señala que hay que prestar atención al tipo de ropa que usamos, ya que no tiene que hacer efecto de liga, y el tipo de calzado porque “es fundamental el buen apoyo plantar para el funcionamiento de la bomba muscular”.
“Es importante también el tratamiento de las alteraciones osteoarticulares y observar las disfunciones de la marcha de las personas que las padecen. Además, es relevante el oficio o profesión que desarrolle una persona, o sea la permanencia prolongada de pie o estar sentado son factores negativos para el desarrollo de la enfermedad venosa”, sostiene la experta. Con todo, concluye que un aliado indiscutible en la prevención de los trastornos venosos es un estilo de vida saludable, que incluye cambios en la dieta, el control de peso acorde a edad, sexo, actividad física y laboral.
Los síntomas más frecuentes de los problemas circulatorios son la hinchazón de las piernas, el dolor, los calambres, las parestesias (sensación de hormigueo o pinchazos), alteraciones en la coloración de la piel, sequedad de la misma, picazón o aparición de úlceras venosas (esta última es signo de un caso muy avanzado). “Muchos trastornos en la piel son debido a la insuficiencia venosa. Por ejemplo, un aumento de la coloración, adelgazamiento, endurecimiento de una zona de la piel, la presencia de várices, arañitas vasculares, que pueden ser azules, rojas o ambos colores con distinta disposición”, detalla la profesional.
Por último, subraya la importancia de consultar a un especialista ante la presencia del menor síntoma para que pueda realizar el diagnóstico precoz y ponga en marcha un tratamiento con drogas venotónicas, compresión, geles o cremas tópicas a través de la piel. “Cuando se hace el posterior diagnóstico de precisión contamos con muchos tratamientos para dar solución a ese problema varicoso especial que presenta el paciente”, destaca.
Por ello, este miércoles 5 de abril de 09.00 a 11.30, en el Hospital de Clínicas (en el hall de entrepiso, ingreso por calle Paraguay) se realizará esta campaña gratuita y abierta a la comunidad enfocada en la detección precoz de la insuficiencia venosa y linfática.
La iniciativa consistirá en un circuito de salud donde los pacientes irán rotando por distintas estaciones en las que se le tomarán los datos personales, se les evaluará el índice de masa corporal, se hablará de la alimentación saludable, la importancia del ejercicio físico y se les efectuará un diagnóstico no invasivo con ecodoppler y la compresión en forma de vendas y/o medias. Asimismo, se programarán turnos para continuar con el seguimiento por el servicio.
