Un joven de 16 años denunció haber sido atacado por dos empleados de seguridad a la salida del boliche Ikki, en la localidad bonaerense de Moreno. El adolescente sufrió hundimiento de tórax, fisura del tabique y lesiones en un ojo. Según su familia, el caso pudo haber terminado en una tragedia similar a la de Fernando Báez Sosa.

El incidente ocurrió este fin de semana cuando los patovicas acusaron al joven de ser un ladrón de celulares. "No te queremos ver más por acá robando celulares", le habrían dicho antes de golpearlo y sustraerle sus pertenencias, entre ellas un iPhone 11, su DNI y una campera azul, según denunció la madre del chico, Paola, en diálogo con Primer Plano Online.

Tras el ataque, el joven escapó hasta la casa de su primo y fue trasladado por su familia a la Clínica Provincial de Merlo, donde permanece internado en observación debido a las graves lesiones.

La causa está en manos de la fiscal Carina Saucedo, de la Fiscalía Nº 2 de Moreno-General Rodríguez, quien ordenó la obtención de la historia clínica y las cámaras de seguridad del boliche para esclarecer los hechos. "Lo que le hicieron a mi hijo no tiene perdón", expresó con indignación la madre de la víctima.