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El sujeto fue condenado a cadena perpetua, mientras que Lucía Carrasco no sufrió ninguna condena.
La Justicia finalizó este lunes por la tarde el extenso juicio por el crimen en Malargüe de Nélida Villar, la joven de 21 años que fue asesinada en el año 2013. Asimismo, su amante, Abel Arnaldo Vázquez, fue condenado y la esposa del hombre terminó absuelta.
El sujeto fue condenado a cadena perpetua como autor del delito de "homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género".
Por su parte, Lucía Carrasco no sufrió ninguna condena, algo que se preveía debido a que la propia Fiscalía había retirado la acusación durante el debate oral y público, según consignan medios locales.
Los jueces también dictaron la prisión preventiva de Vázquez hasta que quede firme la sentencia. Es decir que si bien llegó en libertad al juicio, este lunes se retiró esposado de la sala de audiencias.
Nélida Villar fue asesinada de una puñalada el 7 de mayo de 2013. Su cuerpo fue hallado en los primeros minutos del día siguiente en las inmediaciones del cerro San Ceferino. La investigación apuntó rápidamente contra su vecino de enfrente, Abel Arnaldo Vázquez. Si bien este hombre estaba casado con Lucía Carrasco y tenían dos hijos, los pesquisas reconstruyeron que era amante de la víctima fatal.
De hecho, su celular y el de la víctima fatal tenían permanente comunicación.
A los investigadores les llamó la atención que mientras la joven de 21 años estaba desaparecida y su familia realizaba marchas en buscar de dar con su paradero Vázquez jamás se preocupó en llamarla para ver dónde estaba.
La sospecha se terminó de confirmar cuando se detectaron rastros de semen del sospechoso en el cadáver de la víctima, aunque no había lesiones correspondientes a un abuso sexual.
En tanto, otra línea investigativa puso la lupa sobre Lucía Carrasco. La nueva teoría sostiene que la mujer siguió a su esposo hasta encontrarlo con su amante y decidió quitarle la vida.
Carrasco terminó imputada con una doble calificación: homicidio u el mismo delito pero en estado de emoción violenta. Sin embargo, terminó desvinculada.
