Pocos días después de que las Fuerzas Aéreas paquistaníes publicaran las imágenes de una prueba de sus misiles inteligentes, la India respondió con las pruebas de sus propios proyectiles de alta precisión.

En el caso de Pakistán se trataba de un misil aire-tierra de largo alcance, pero la India mostró sus nuevos cohetes tierra-tierra desarrollados para lanzaderas múltiples.

Son una versión actualizada de los misiles de fabricación nacional Pinaka. Los Mark II en concreto ofrecen la posibilidad de implementar los ataques con una mayor precisión y a una distancia más larga gracias a un nuevo sistema de guiado.

La Organización de Defensa e Investigación de Defensa (DRDO, por sus siglas en inglés) comunicó que los primeros dos lanzamientos se llevaron a cabo el 11 de marzo, mientras que hubo otro el día 12.

Las primeras pruebas del renovado misil se llevaron a cabo en 2013 y se estima que podría tener un alcance de hasta 130 kilómetros, aunque en el transcurso de las pruebas solo fueron alcanzados los blancos a una distancia de 75 kilómetros.

Previamente, los dos Estados asiáticos tuvieron enfrentamientos armados después de que creciera la tensión tras un ataque terrorista que se saldó con las vidas de más de 40 militares indios el 14 de febrero.

Como respuesta al ataque, la India bombardeó en territorio paquistaní el campamento de la organización terrorista que asumió la responsabilidad del ataque. Esto desencadenó a finales de febrero una serie de enfrentamientos entre los militares.