Aunque evitó decir que será detenido, Maduro dijo este martes que el también presidente del parlamento venezolano debe "respetar la ley" y amenazó que si regresa al país "tendrá que ver la cara de la justicia", ya que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) le había impuesto una medida cautelar donde este no podía salir del país.

“Si una corte dice que Donald Trump o Barack Obama no pueden dejar el país durante una investigación judicial, si ellos se van y vuelven, ¿qué debería hacer la ley estadounidense? Que cada quien saque sus conclusiones”, dijo el jefe de Estado durante una entrevista a la cadena ABC News después de haber expulsado del país a 6 periodistas de la cadena Univisión y haber confiscado su equipo de televisión.

Maduro añadió que “nadie puede evadir la ley. En este caso, el señor Guaidó tiene que responder ante la justicia, no ante Nicolás Maduro”.

Por su lado, Juan Guaidó se encuentra en Colombia desde el jueves pasado. Viajó por carretera a la frontera, primero al Táchira y luego a Cúcuta para encabezar la caravana de ayuda humanitaria que finalmente fue abortada con represión por el régimen de Maduro.

Guaidó aprovechó para participar en la reunión de cancilleres del Grupo de Lima, celebrada este lunes en Bogotá, y en las próximas horas tiene previsto regresar a Caracas. Ha denunciado que su vida y la de su familia corren riesgos y han sido amenazados.

La cadena NTN24 entrevistó al presidente encargado, quien afirmó que “mi función y mi deber es estar en Caracas, a pesar de los riesgos que implica. Si me pasa algo hay instrucciones muy claras a nivel de movilización y acciones internacionales. Lo que no se pierde es la causa”.

El goteo de militares venezolanos que abandonan a Maduro va en aumento. Hasta hoy la cifra es de 326 militares que se han refugiado en Colombia. El último de ellos es el mayor del Ejército, Carlos Enrique Roso Romero, subdirector del Centro de Adiestramiento de Combate “Coronel Antonio Ignacio Rodríguez Picón”, junto a dos sargentos de la Guardia Nacional Bolivariana -GNB-, En su pronunciamiento reconoció a Juan Guaidó como presidente interino del país.

Maduro está perdiendo autoridad hasta en sus ejecuciones administrativas. El 22 de febrero decretó como días festivos los días 28 de febrero y 1º de marzo para enlazar con el lunes y martes de carnaval. Así tendrían una semana festiva entera, no laborable.

Sin embargo, la oposición decidió trabajar como siempre el jueves y viernes de esta semana, y no acatar el decreto de Maduro. El sector bancario dijo que trabajará esos días y no cerrará la ventanilla. Lo que avanza es la desobediencia civil. El artículo 350 de la constitución en plena vigencia.