El levantamiento militar en Bolivia está en el centro de la atención mundial. Inicialmente catalogado como "Golpe de Estado", rápidamente comenzó a ser visto como un "autogolpe" debido a las declaraciones del ex comandante general del Ejército boliviano, Juan José Zúñiga. Antes de ser detenido por la Policía, Zúñiga aseguró que el propio presidente, Luis Arce Catacora, le ordenó la acción: "El día domingo me reuní con el Presidente y me dijo que la situación está muy jodida, que esta semana va a ser crítica y que era necesario preparar algo para levantar su popularidad", precisó.

Carlos Sánchez Berzain, exministro de Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, corroboró las declaraciones de Zúñiga en diálogo con MDZ Radio 105.5 FM, indicando que "las encuestas de opinión pública establecidas por Gallup hace unas semanas muestran que Arce Catacora es el antepenúltimo presidente con menos respaldo en la región, con un 18% de apoyo popular". Añadió que, ante las crisis, "se ha utilizado un mecanismo muy usual en los sistemas del socialismo del siglo XXI", pero que en esta ocasión, "les ha salido mal".

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Economía

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Sánchez Berzain explicó que Bolivia enfrenta un panorama de crisis con más de 300 presos políticos, incluyendo civiles y militares, denunciado internacionalmente. Afirmó que Bolivia no es una democracia, comparándola con países como Cuba y Venezuela. También mencionó la crisis económica, las protestas por la falta de gasolina y la pérdida de Bolivia como productor de gas.

El exfuncionario detalló que en medio de la Asamblea General de la OEA en Asunción, Paraguay, aparecieron tanquetas en La Paz. El comandante general del Ejército no pidió un cambio de presidente, sino del gabinete para reconducir el gobierno. "Esto no es un golpe de Estado, es una comedia. En un golpe de Estado se controlan físicamente áreas estratégicas, detienen a la gente del gobierno y piden cambiar al Gobierno", afirmó Sánchez Berzain.

Además, señaló que Evo Morales y Luis Arce Catacora están enfrentados ante las próximas elecciones. Zúñiga habría defendido a Arce, afirmando que no permitiría que Morales sea candidato. Sánchez Berzain destacó que Morales, quien maneja las federaciones de productores de coca y cocaína, busca volver a la presidencia mientras Arce Catacora quiere reelegirse.