La Guardia Civil española desarticuló una organización que se dedicaba al tráfico de personas y había introducido al menos 600 migrantes desde Marruecos en lo que va de año, según confirma el Ministerio de Interior.
La Guardia Civil española desarticuló una organización que se dedicaba al tráfico de personas y había introducido al menos 600 migrantes desde Marruecos en lo que va de año, según confirma el Ministerio de Interior.
Según los agentes, la trama introducía migrantes por vía marítima a cambio de 2.500 euros por persona, con lo que habría obtenido un beneficio superior al millón y medio de euros.
Los detenidos, que pasaron a disposición judicial, vivían en Cádiz, Málaga, Murcia y Palma de Mallorca.
El contacto con los migrantes se producía en Marruecos, según relata el comunicado ministerial.
La red de tráfico de personas hacía publicidad de su negocio hablando de la forma de vida en los países europeos, exagerando las medidas de acogida.
El líder de la organización residía en Marruecos y era quien reclutaba a los migrantes, con la ayuda de dos hermanos que vivían en Cádiz y Palma de Mallorca.
La investigación logró identificar a la trama después de un accidente de tráfico que se produjo en Cádiz, en la que el conductor abandonó a los migrantes heridos.